Miraba a cada uno una y otra vez, mientras trataba de procesar el hecho de que eran seres sobrenaturales y de que tuviera el privilegio de saber lo que eran. Estas cosas no sucedían. Jamás en mi vida había pensado que algo como esto me pasaría, no sabía cómo actuar ante esto, pero de lo que sí estaba segura, era de que necesitaba con urgencia respuestas, respuestas que ellos me darían justamente ahora. -Ok, son ángeles -tal vez si lo decía en voz alta, haría que lo procesara más rápido-. Y tienen una misión… yo. Habíamos salido del colegio a petición mía y ahora estábamos en casa de ellos, en la sala, todos cinco sentados mientras me veían en silencio como trataba de entenderlo todo. Tenía mucho que procesar y a mi parecer lo estaba haciendo bien. -Ya me cansé -Elemiah se levantó