“Veo como Altair conspira junto con Artemis en contra de Calisto, no puedo evitar sentirme molesto.
La cólera invade mi interior y siento una necesidad de asesinarles, pero no puedo.
En esta dimensión la voluntad de Dios y sus reglas parecen ser más absolutas que en otros lugares.
Como ya le había salvado la vida en otras ocasiones, se perfectamente que los arcángeles no tardarán a venir en mi encuentro.
Tampoco quiero que maten a Cal, parece ser que mi amado muchacho está destinado a morir; me fastidia bastante saber que más de una persona intentará matarle, y no importa cuantas veces le salve simplemente está destinado a fallecer.
No.
No quiero que muera y no morirá jamás, no dejaré que le suceda lo mismo que a Sariel, Calisto vivirá para siempre a mi lado. Será mío, yo se que si.”
