Lisa se había convertido en la voz de mi cabeza, pero este caso era diferente, no era mi conciencia la que me hablaba, era mi memoria. Cuando entre al quirófano lo primero y las únicas palabras que me dijo Lisa fueron "cuidado con lo que buscas". Pero sin darme cuenta, había decidido ignorar esa advertencia hasta este momento. Porque en este momento fue donde más pensé en el hecho de que tal vez ella realmente sabía todo, que tal si en realidad si podía saber lo que pienso. No sé cómo, pero que tal si es posible. Estaba comenzando a arrepentirme de lo que estaba haciendo pero no podía parar, no ahora que había comenzado, ya estaba en un punto de no retorno, solo me quedaba arriesgarme
Así que mientras giraba el pomo de la puerta de la oficina de Lisa, escuche que las puertas de seguridad del pasillo se abrían, así que me apresure a entrar a la oficina y cerré con sumo cuidado. Al entrar pude detallar que había diferentes cuadros en las 4 paredes de la oficina, todos eran de paisajes diferentes, uno era de un paraíso amazónico, otro era de un desierto, el tercero era de un mar profundo y la cuarta era del polo norte.
También tenía un escritorio muy moderno a diferencia del último que vi. Este era de metal y era de color n***o. El alfombrado de todo el piso era gris con una alfombra de oso polar en medio de la sala. Las paredes eran blancas, y en las esquinas del fondo había 2 plantas exóticas, una para cada rincón. A diferencia de la oficina vinotinto, esta no hedía a nada, era casi inolora.
Comencé a buscar informaron a cerca de Barkley en los archivos físicos y también en la computadora de Lisa, pero en realidad no fue mucho lo que encontré, sin embargo hubo algo que se me quedo grabado... era una carpeta que decía "último p**o Barkley" revise esa carpeta y resulta que había sido creada hace poco tiempo, horas, para ser especifico. Así que uní ese p**o hace poco tiempo con "la voz" de hacía poco tiempo, aquella que escuche en el laboratorio por los parlantes antes de que la anestesia surtiera efecto, y la única conclusión posible es que Barkley había pagado una suma de 18.000 dólares por algo que tenía que ver con la operación, o al menos eso era lo más lógico según la información que tenía.
El p**o que se había emitido era muy alto, o al menos es uno de los más altos que he visto. Y lo extraño es que no especificaba de que era el p**o, solo habían códigos numéricos y cantidad de piezas, por ejemplo:
Nro-Pieza --- R0048 --- cantidad de piezas ---5
Así que ahora había una pregunta nueva. ¿Piezas de qué? y ¿Qué tiene que ver ese hombre en las operaciones que me han hecho últimamente?, ¿Por qué estaba en la sala?... allí fue donde me di cuenta de lo que pasaba. Comencé a buscar facturas similares y la computadora estaba repleta de ellas, pero las de Barkley siempre eran las mayores. Eso quería decir que Bárkley era el comprador mayoritario, pero… ¿De qué?
De pronto mis recuerdos comenzaban alinearse como un rompecabezas. Fue como una simple suma. Por un lado estaba el hecho de que las últimas intervenciones que me habían hecho, todas consistían en mutilación de extremidades y extracción de órganos. Los brazos y piernas sobre aquella mesa ensangrentada era la imagen más vivida que tenía de ello.
Por otra parte estaba la aparición de Barkley, las cuales han sido casualmente en las operaciones de mutilación y extracción.
Y el inquietante hecho de que Barkley pagará una suma importante en mi operación. También en mi mente estaba plasmada la imagen del cuadro que vi donde señalaba las partes de un ser humano como si fuese ganado. Algo muy turbio estaba pasando aquí. Pero en ese momento ya estaban a punto de abrir la puerta, y era nada más y nada menos que Lisa
De inmediato puse la computadora en reposo, la deje tal cual como estaba y me escondí bajo el escritorio, no tenía ninguna otra opción. Lisa abrió la puerta rápidamente y venía hablando con alguien por teléfono, al entrar se acercó al escritorio y tomo unas llaves que estaban en la gaveta del escritorio. Mientras tanto ella discutía con la persona al teléfono
- Si, Señor, sí, todo está bajo control, es solo un pequeño problema con el muchacho, de nuevo tiene un episodio de violencia pero ya está bajo control – dijo con temor.
- Eso espero Lisa, sabes muy bien de lo que es capaz ese fenómeno si pierde el control, y no queremos que se repitan los mismos errores ¿O me equivoco? – Dijo la voz del otro lado del teléfono
Era una voz que no conocía, solo pude distinguir que era un hombre mayor. Lisa estaba sumisa y su voz temblaba a cada palabra que decía. También pude darme cuenta de lo acelerado que estaba su corazón. Era muy extraño ver a Lisa con esa actitud, comenzaba a entristecerme el hecho de haberle causado problemas a Lisa, pero debía hacerlo, habían demasiadas irregularidades y no me explicaban nada, así que esto era por el bien del proyecto de mis padres, lo siento Lisa
Pero jamás pude imaginar la forma en la que Lisa respondió.
- No señor, Claro que no se repetirá, ese maldito niño no dará mayor problema, como le dije, ya está controlado, en 5 minutos abriremos la celda y lo terminaremos de neutralizar. Sabemos lo importante que es este negocio para usted, no lo defraudaremos – dijo Lisa mientras su cara se ruborizaba y su voz se alteraba cada vez más.
Para mí fue como una delgada copa de cristal partiéndose en mil pedazos. Saber que a lo que yo llame mi habitación, ella la llamo celda y escuchar de sus labios el desprecio que me tenía. Lisa era la única figura materna que he tenido, ella me ha enseñado, me ha cuidado, así que ¿por qué ahora dice eso?... Sé que cause un problema, pero de ahí a que me maldiga y a que me odie... No entendía. Porque si eso era lo que en realidad sentía, ¿Para qué me trato bien y me ayudo? La lisa que estaba frente a mí en ese momento era nueva... O acaso ¿Era la única y yo no la conocía?