Ámbar bailaba meneando sus caderas sobre un tubo, todas las noches, desnuda o a medio vestir, siendo alabada y coqueteada principalmente por hombres asquerosos de aspecto dudoso. Ámbar amaba bailar, aun cuando lo empezó a hacer por hambre y no era exactamente el publico que ella soñaba. Se veía a si misma en sus sueños, bailando danza contemporánea, quizás ballet, algunas veces incluso salsa. Siendo aplaudida por unos y un ejemplo a seguir para otras como ella, pero luego de eso despertaba, algunas veces por el frío del viejo lugar donde vivía que no contaba con calefacción, otras veces por el ruido de las ratas al colarse por las rendijas, y despertaba. Ámbar dejaba de soñar para volver a su triste vida. Su madre fue una alcohólica empedernida desde la infancia, ella no tenia un recuer