Evans empezó a recorrer el cuerpo de Nathalie con dulzura, y algo nervioso, no quería arruinar el momento, no quería que ella pensara que él se estaba aprovechando de ella, pero es que Nathalie lo volvió loco, toda ella era algo que nunca había imaginado. El sonido de las olas y la música hacía el lugar más romántico, en especial porque no había nadie alrededor, los chicos no dijeron nada porque ellos salieran y se fueran. —Eres demasiado perfecta para ser real, — dijo separándose un poco de ella, no quería seguir o no podría parar. Nat sonrió al oírlo. —Seguro le dices eso a todas. — él negó con la cabeza antes de contestar. —No cariño, en realidad nunca he sido un hombre cariño, mucho menos detallista y que le diga cosas dulces a una mujer, no me enorgullece, pero las mujeres con l