-¿Eres idiota?
¿Sabes? A veces me gusta tener un contexto para preguntas como esas. ¿Acaso sigues saludando de esa forma a las personas? No es una crítica, la verdad me gusta que siempre te aparezcas de esa forma porque es chistoso. Decir cosas fuera de contexto es tu forma de comedia y siempre me ha gustado eso de ti ¿Acaso sigues haciendo esa clase de chistes? Me gustaría poder oír uno de esos.
Pero bueno, eso lo empecé a apreciar después de conocerte, como en esos tiempos recién empezábamos a formar una amistad la pregunta me tomó totalmente desprevenido. Me hubiera gustado saber el contexto de esa pregunta porque yo estaba revisando mi teléfono bajo ese gran árbol del parque y de repente a p**o de nada me bombardeaste con un montón de incoherencias y frases que ni siquiera sé si eran insultos u otro intento de apodo que querías darme.
Supe que estabas molesta cuando me golpeaste en la cabeza con tu libreta.
-¿Auch?-Dije sobándome y mirándote confundido.
-La espantaste. No puedes hacerle eso a alguien como Emily en una cita.
-¿Qué se supone que hice mal?-Te pregunté confundido mientras que tú me mirabas como una madre leona dispuesta a matarme por haber tocado a uno de sus cachorros. -No hice nada fuera de lugar. Salimos e hice lo que se hace en las citas. Es ley que la tengo que besar.
-¡Pero no a Em, idiota!-Me diste otro golpe.
-¡¿Auch?!
-Ella no es como las demás chicas, Dan. Es tímida y cuesta mucho llegar a ella. Es como un ciervo en un bosque, no puedes simplemente llegar y disparar como un desquiciado, así no es como uno caza ciervos.
-Creo que sí es así como se ca—
-No me interrumpas.
-P-Pero creí que—
-¡Pues creíste mal!-Volviste a golpearme. Yo solté otra maldición antes de verte sentarte a mi lado. Yo sobé mi cabeza intentando comprender tu enojo y molestia.
-¿Volverá a hablarme?
-No lo sé, estaba bastante alterada cuando me llamó, Dan. Tal vez le tome un par de días hacerlo. Está asustada. Nunca le había pasado algo como esto.
-¿Algo como esto?
-Nunca la habían besado.