Una fila de 10 científicos, entre esos Jackson y Brandon, esperaban ansiosos la llegada del contenedor que traía al nuevo espécimen capturado para analizar. Un camión con el emblema del ejército estadounidense parqueó en la base subterránea del área 51, las puertas traseras se abrieron y dos soldados fornidos sacaron en una carretilla la capsula con el emblema de la NASA que traía en su interior al extraño espécimen, que por lo que sabían los científicos era una fémina hibrida entre terrícola y una alienígena desconocida. -¿Quién es el encargado de la investigación del espécimen 43? – preguntó uno de los soldados. -Yo – respondió Jackson, no sin cierto nerviosismo en la voz. -Firme aquí – dijo el soldado, tendiéndole una planilla -. Y tenga cuidado doctor, me dijeron que durante el tra