Merlín despertó, con la visión borrosa y sintiendo una horrible jaqueca. Una luz blanca parecía estar sobre él, una luz que le transmitía paz y tranquilidad. Cuando su visión al fin enfocó bien, vio que estaba en su habitación de la base de Los Vigilantes, y aquella luz bajó su brillo y vio unos hermosos ojos azul zafiro observándolo con atención. Reconoció a la chica como Jelena, era idéntica a su hermano, pero aún más hermosa. El mago no evitó quedarse sin habla ante tanta belleza. -Mi señor ¿Se encuentra bien? ¿Sigue son aturdimiento? – Le preguntó la chica, con una dulce voz que a él solo lo dejó más hipnotizado, y un inconfundible acento ruso - ¿Señor Merlín? – volvió a preguntar la chica, cambiando su semblante a uno de preocupación. -Estoy bien – logró gesticular él, saliendo de s