CAPÍTULO V-4

1184 Words

—Eras demasiado joven para enfrentarte a esas cosas— dijo el Marqués. —Creo, más bien, que tenía la cabeza en las nubes. La poesía es tan hermosa que hace restar importancia a las cosas mundanas y materiales. No fui nada práctica. —Uno nunca espera que una mujer sea práctica. Y ahora, Romana, puedes volver a tu poesía y dejar que yo me encargue de todas las cosas materiales y banales. —Eso es lo que me gustaría hacer— confesó Romana—, pero, de algún modo, me hace pensar que voy a volverme una perezosa. —Hay, en realidad, muchas cosas prácticas que puedes hacer al mismo tiempo —sugirió el Marqués—, como entretener al Lord Magistrado de Justicia, y no olvidar ser amable con el representante del Rey en el condado. Romana lanzó un pequeño grito. —¡Ahora está siendo malo conmigo! Le prome

Free reading for new users
Scan code to download app
Facebookexpand_more
  • author-avatar
    Writer
  • chap_listContents
  • likeADD