Prólogo

4136 Words
—Por favor Chloe —Lizzie junto las palmas de manos en frente de su rostro mientras se ponía casi de rodillas en el piso de madera del apartamento que compartían Chloe que llevaba media hora negándose a la petición de su amiga “¡Es simplemente arriesgado!” pensó Chloe recordando el descabellado plan de su mejor amiga —No quiero meterme en problemas Lizz… —Empezó con la intención de repetir lo que ya le habia dicho con tal de disuadirla —Chloe  no tienes porque preocuparte por nada, el señor Galiano ni siquiera notara tu presencia en el apartamento —Aseguro su amiga con convicción Chloe la miró, su amiga tenía esos ojos de enamorada que ya habia visto antes, esa era la razón principal por la que ahora le estaba pidiendo un gran favor, pero ella sabia que no valia la pena lo suficiente, en especial porque habia conocido al nuevo pretendiente de su amiga y el tipo no era menos que desagradable, lo habia sabido cuando miraba a su amiga con el mismo deseo con el que miraba a las demás e incluso a ella misma, era un jugador que estaba buscando entretenerse con los sentimiento de su amiga No le interesaba en lo absoluto su amiga                           Pero no consiguió nada metiendo esa idea en la cabeza de su amiga, no sabia que pasaba ahora por su mente para estar con tal persona a su lado pero lo cierto es que no se iba a meter en sus decisiones Habia cumplido con avisarle asique que guerra avisada no mata soldado “Y si mata es por descuidado”   —No lo sé —Dijo Chloe dirigiéndose hacia la pequeña cocina del pequeño apartamento que compartía con Lizzie pisando sus talones —Te prometo que es primera y última vez que te pido algo asi —Dijo su amiga adoptando una cara de perrito triste que la hizo entornar los ojos Intentó imaginarse al jefe de su amiga sin éxito en conseguir colocarle rostro y cuerpo al apellido del hombre pues nunca lo habia visto sin embargo tenía la reputación de ser un hombre frio y tosco aparte de ser increíblemente guapo, o eso habia dicho Lizzie, ella trabaja en el apartamento de lujo del hombre como ama de llaves los fines de semana, habia perdido la cuenta de las veces en que le habia dicho a su amiga que dejara el trabajo y tomara un descanso, pero ella le habia respondido: “Prácticamente gano muy buen dinero por hacer nada, limpio rápidamente el lugar que en su mayoría esta impecable pues casi  el jefe ni nadie a parte del personal están, luego de eso me queda mucho tiempo libre para mensajearme con mi amorcito” Si, Chloe también estuvo a punto de poner los ojos en blanco cuando su amiga  le habia dicho eso, no era de piedra, era amante del romance y defensora del amor, pero era precisamente la falta de ello en la relación de su amiga la que la dejaba fría Suspirando preparó un poco de té mientras su amiga aun  conservaba el puchero en su rostro —¡Vamos Chloe! —Su amiga le rogó —Se que no harás nada el fin de semana, intentaré llegar el Domingo temprano al trabajo, Anton quiere llevarme a cenar y tengo que tener todo listo a tiempo, sabes que él no hace mucho ese tipo de cosas… Realmente quiero ir —Los hombros de su amiga se derrumbaron y ella sintió una punzada de tristeza y enojo hacia su novio Si, era un milagro cuando el tipo se dignaba en salir con su mejor amiga, sabia que tenía dinero pues se la pasaba gastándolo en apuestas estúpidas que siempre perdía ¿Lizzie veía eso? ¡Para nada! —Pfff —Suspiró, sirviendo en dos pocillos de porcelana el te que ya habia hervido — Esta bien, te ayudaré —Dijo Lizzi dio un pequeño salto en su lugar mientras la abraza y depositaba un corto beso sobre su mejilla —¡Eras la mejor! —Sonrió y Chloe le devolvió  la sonrisa, adoraba ver a su amiga feliz, era solo dos años menor que Chloe, con veinticuatro años la joven chica habia tenido que aplazar sus estudios para poder trabajar y sobrevivir, se habian conocido en la secundaria y a partir de ahí habían sido inseparables, cuando la madre de Chloe la hecho de su casa por mantener a sus conquistas Lizzie habia estado ahí para brindarle un techo hasta la muerte de su madre donde oficialmente ambas estaban solas Pero eso habia ocurrido hace casi cinco años atrás, juntas habian conseguido trabajos diferentes para de algún modo sobrevivir y no terminar en la calles de Londres cuando la madre de su amiga habia fallecido en un accidente de trancito, Lizzie estaba la mayor parte de la semana terminando sus pasantías a sueldo  en una empresa rusa y estaba a punto de obtener su licenciatura, desde hace unos meses atrás trabajaba los fines de semana en la mansión de su jefe  encargada de la limpieza del lugar, el sueldo era muy bueno y realmente lo necesitaban Chloe trabaja y se dedicaba al cien por ciento en la biblioteca pública y de vez en cuando hacia de institutriz para niños de primaria, hace unos años con mucho esfuerzo habia logrado graduarse en Educación primeria pero no habia podía ejercerla como tal en una institución debido a que tenía que estar pendiente de conseguir dinero constantemente y esperar una quincena suponía perder el pan hasta entonces, mientras que trabajando por su cuenta veía alguno ahorros que las ayudaban a sobrevivir y a pagar el alquiler del apartamento que compartían   —Te prometo que no tendrás problemas —Dijo su amiga —El jefe muy rara vez esta en esa mansión, casi nunca viene a Londres, creo que es italiano o no sé Chloe si encogió de hombros —Si tu lo dices… Esta bien —Murmuró con la taza de té contra sus labios dando un pequeño sorbo al liquido humeante ¿Realmente que cosa tan mala podría suceder? Haria el trabajo de su amiga por una noche donde estaría prácticamente sola en una casa, barrer, limpiar, sacar polvo y ordenar… Nada fuera de este mundo Chloe se contuvo de hacer una mueca Definitivamente pasar una noche de sábado limpiando una casa ajena no era lo más atractivo pero su amiga tenia razón, realmente no hacia mayor cosa su fines de semana, excepto los Domingo donde se dedicaba exclusivamente en las noches a leer  unas novelas y tomar su tecito de manzanilla para ayudar a relajarse La sensación que experimentaba en ese momento era la mejor del mundo para ella, lo veía como una forma de expresar su amor asi si misma, dedicando tiempo para ella y dejando su mente viajar con las emociones historias que devoraba en una noche para luego caer rendida contra la almohada *** Era sábado por la tarde, Chloe habia llegado al lujoso apartamento al medio día, habia visto el lugar y definitivamente el pensamiento de terminar temprano con los quehaceres del lugar seria un sueño casi imposible de hacer realidad Ese día tuvo la mala suerte de ser la única encargada de la limpieza, su amiga  le habia avisado el día anterior que una de sus compañeras se habia enfermado y después de rogarle un poco más a  Chloe para que aun asi se quedará habia decido ponerse manos  a la obra, pero no habia imaginado que el lugar fuera tan grande Hizó un puchero al imaginarse todas las habitaciones y lugares por lo que tendría que limpiar,  al menos seria unas cinco habitaciones, el pasillo y una inmensa concina, luego la sala de estar y los baños para después revisar el jadin y asegurarse de que estuviera limpio, el apartamento en vez de parecer uno simple como el de ella estaba compitiendo con una mansión En el quinto piso de un edificio… Exclusivo para millonarios Suspirando tomo sus auriculares y busco en su teléfono sus canciones favoritas para ponerse manos a la  obra mientras escuchaba algunas letras de pop pensó “Esto será pan comido” el lugar se veía pulcro pero su mania por la limpieza salió a flote y empezó a hacer el trabajo de su amiga mandando al último rincón de su cabeza su preocupación porque alguien la descubriera Al cabo de unas horas termino, limpio, ordeno y desempolvo todo a su paso, todo eso mientras su curiosidad la guiaba, en todo el proceso no habia encontrado ni una foto del dueño o de los familiares, la cocina estaba impecable y parecía que nunca nadie habia cocinado ahí, sospechaba que realmente el jefe no visitaba mucho su mansión, bien podría imaginarse a un millonario con su propio piso en la ciudad irse a un hotel en el Londres Chloe no entendía a los millonarios pero estaba segura que tanto ella como su amiga agradecían la falta de desorden en el lugar Mientras terminaba de guardar el trapeador y demás utensilios de limpieza se fijo en la hora que tenía en su celular y abrió los ojos asombrada —Virgen Maria —Murmuró en la soledad del pasillo viendo que  pronto serian las ocho de la noche, sabia que no podía ser un error pues cuando corrió las cortinas de uno de los ventanales pudo ver que ya no quedaba ni un rayo de luz que iluminara la noche, todo era oscuridad, entre todo lo que habia hecho habia perdido la noción del tiempo Tenía que volver a casa “Bueno, al menos este día transcurrió sin ver al jefe” pensó con sonrisa cansada y frunció el ceño al escuchar el sonido de un auto en el exterior y cuando dio un segundo vistazo a la ventana vio una alta figura masculina bajarse de un auto deportivo varios pisos más abajo y caminar hacia la puerta Al cabo de unos minutos escucho el pitido del ascensor en el pasillo disparando todas las alarmas en su cabeza “Que hago. Que hago. Que hago” estaba a punto de sufrir un ataque de pánico mientras miraba hacia todos lados en busca de una salida de escapa, no podía irse por la puerta principal sin encontrarse con el recién llagado y dudaba llegar a tiempo a la puerta trasera y rodear la gran alberca esperando pasar desapercibida Pero tenía que intentarlo Casi a la velocidad de la luz termino de guardas las cosas y  al ver que aun batallaba con el delantal blanco que cargaba simplemente tomo su cartera en  una mano y sus tacones en la otra haciendo una carrera hacia la puerta trasera cruzando esta justo en el momento en que escucho el sonido de la puerta principal abrirse y agradeció la escasa iluminación de la alberca en ese momento, las sombras que le brindaba la oscuridad de la noche era suficiente para poder rodear la enorme piscina sin que nadie lo notara, ajustando su débil moño que dejaba libre sus rizos rubios paso en frente de unos enormes ventanales  a un costado de la casa que iban desde el suelo hasta casi rozar la punta del cielo raso  y deslumbro por un segundo una mano dejar sobre una silla en la sala de estar un saco y no se quedo para ver mucho más mientras las posibles consecuencia de su presencia en el podía representar un problema para ella Ya podía escuchar los gritos del hombre en la estación de policía, seguramente pensarían que era una especie de ladrona, caería una demanda sobre ella e incluso la cárcel que con solo el pensamiento de ello causaba un estremecimiento por todo su cuerpo Ignoro todos esos pensamientos mientras miraba la gran alberca e intenta pensar en una forma rápida de rodearla sin ser descubierta en el proceso pero cuando esta a punto de volverse e “inspeccionar el perímetro” una vez más una voz ronca y grave la hizó dar un respingón y un pequeño grito escapo de sus labios al mismo tiempo en que sus manos iban directo hacia su pecho sintiendo su corazón latir rápidamente y la adrenalina combinada con el susto la hacian temblar en su lugar —¿Quién eres tu? —Dijo la voz masculina  enviando señales eléctricas por todo su cuerpo mientras que ella se esforzaba por ver en medio de las sombras al hombre que la habia descubierto Entonces él dio un paso hacia ella y su respiración quedo atascada en su garganta “Bendito Dios” pensó abriendo los ojos y recorriendo con la mirada su perfil para luego sonrojarse cuando una perfecta y oscura ceja se arqueo mientras la miraba Todo en él gritaba una sensualidad que nunca habia visto, debía medir al menos 1,80cm,  siendo varias cabezas más alto que ella, a través de su camisa y por su postura sabia que ocultada masas de musculo pues podía verlo tensarse debajo de la tela —Lo repetiré una vez más —Murmuró el desconocido cerniéndose peligrosamente sobre ella a cada paso que daba y ella en consecuencia retrocedía en silencio, de repente muda sin apartar los ojos de él —¿Quién eres tu y que estas haciendo en mi propiedad? —Pregunto él hombre y ella cayó en cuenta que estaba ante el dueño de la mansión Definitivamente habia sido descubierta Para su sorpresa su tono no era acusatorio y mucho menos molesto, parecía curioso y vio algo brillar en sus ojos ella no supo descifrar “Piensas Chloe, piensa” intento apartar los ojos de su cuerpo y centrarse en su ojos, a la distancia eran de un color azul marino, su mirada era tan intensa que por un momento tuvo el absurdo pensamiento que sabia en lo que estaba pensando, que en ese momento era en comprobar bien de cerca realmente el color de su mirada Entonces la punta de su lengua apenas salió casi imperceptible a lamer su labio inferior y ella abrió los ojos asombrada sintiendo el calor extenderse por su rostro ¡¿Sera que le estaba leyendo la mente?! Chloe movió la cabeza para alejarse del rumbo al que la estaban llevando sus pensamientos Tosio esperando no tartamudear y cruzó los dedos detrás de su espalda, todo su cuerpo de seguro estaba cruzado, la adrenalina  latente en su sistema e iba en aumento en la presencia de aquel desconocido, sus manos sudaban y se encontró asi misma a punto de abanicarse con su mano Nunca ningún hombre la habia afectado tanto como este lo estaba haciendo, aun asi decidió mostrar una seguridad que no sentía en ese momento, una parte de ella queria salir huyendo de ese lugar y la otra estaba plantada ahí, incapaz de moverse ante su intensa y penetrante mirada   —Yo… soy del personal de limpieza señor —Logró murmura reteniendo el aliento  cuando el dio un paso más hacia ella, sus ojos a media hasta a medida que se acercaba le hacia recordar a los felinos cuando acechaban a su presa Y ella se sentía justo como una cebra en ese momento ante el león cerniéndose sobre ella apenas podía dar unos lento y cortos paso hacia atrás —Mmm no— El pareció como si estuviera sospesando su respuesta —No lo eres, conozco el personal que trabaja para mi en todo momento y estoy totalmente seguro de que te habría visto si lo fueras Chloe trago saliva mientras a duras penas su cerebro se ponía a funcionar, y él seguía acechándola lentamente, inquietándola con su presencia —¿A si? —Fue lo único que pudo decir, no sabia si debía mencionar el nombre de su amiga, ella la habia dejado en el lugar para que pudiera entrar y el equipo de seguridad  no sospechara Cuando vieron a Chloe  simplemente la ignoraron y ambas pudieron suspirar aliviadas Pero este no lo estaba haciendo No queria delatar a su amiga pero la idea de terminar en prisión no era la más alentadora, aun asi siguió intentando —Por favor le pido me disculpe, debió haber sido un error de mi parte —Mintió ella —Soy nueva en el vecindario y hoy era mi primer día de trabajo en este edificio, debí  haberme confundido —soltó una pequeña risa esperando apaciguar la tensión s****l que estaba irradiando en ese momento, una risa  que era más nerviosa que otra cosa Si habia pensado que el hombre no podía ser más sexi estaba equivocada cuando vio una deslumbrante sonrisa extender por su rostro sintió una oleada de calor atravesarla y su sonrojo pronunciarse cada vez más —Asi que también eras una pequeña mentirosa —Murmuró cada palaba cargada de un erotismo que  no sabia que era posible —Y una muy mala mentirosa —Su sonrisa se ensancho mostrando una  perfecta dentadura y un hoyuelo en su mejilla Sus manos se apretaron en puños a su costado intentando no amilanarse ante su presencia, a pesar de que era una total intrusa en su propiedad no permitiría que la abrumará —Señor yo… —Comenzó Chloe pero él la interrumpió —Tu mia bella intrusa has sido atrapada —Murmuró a solo unos centímetros de donde ella estaba El miedo se disparo por su cuerpo, la habia descubierto, podría el mismo castigarla por haber irrumpido en su propiedad sin permiso, podría llevarla a la cárcel, un millonario como él bien podría demandarla por el placer de castigarla de algún modo O algo peor Puso sus manos en frente de ella para alejarlo y dio un paso atrás encontrándose con que su pie no tocaba más el suelo solido, al instante sus manos están agarrando el aire en un intento por aferrarse a lo que sea, todo fue como en cámara lenta, su boca se abrió y un jadeo escapo de sus labios mientras veía los ojos de aquel hombre abrirse lentamente y su mano apresurarte por agarrarla Muy tarde La mano de Chloe osciló en el aire y lo siguiente que sintió fue caer al agua fría de la piscina, su ropa empapada pesaba sobre sus extremidades hundiéndola de golpe y dificultando su intento por salir a la superficie, daba patadas inútiles al agua, no era la mejor nadadora del mundo sabia que este seria su fin Su cuervo ondeo en el agua cuando de repente nuevas ondas empujaban su cuerpo y lo siguiente que sintió fue un fuerte brazo rodear su cintura y ella se aferro desesperada mientras veía los faroles de la piscina brillar a medida que salía a la superficie Tosió escupiendo el agua que se habia metido en su nariz y en su boca mientras tomaba grandes bocanadas de aire sintiendo el oxigeno regresar devuelta  a sus pulmones y al cabo de unos segundo reparo en quien habia sido su salvador, se giro en sus brazos chocando contra un pecho solido y mojado esparcido apenas por un polvo de vellos sobre la piel y luego levanto su cabeza encontrándose con los mismo pozos azules que la miraba con preocupación y… ¿pasión? —Cristo…— El hombre suspiró sin apartar sus ojos del rostro de ella —¿Estás bien? Chloe abrió los ojos, ¿realmente lo estaba? Se encontraba en los brazos de un completo desconocido deseando más que solo su perdón por entrar en su casa sin permiso y lo peor es que se sentía muy a gusto en donde se encontraba Asintió despacio recomponiéndose del shock —Si… yo creo que estoy bien —Susurró e hizo además de soltarse de su brazo cuando sintió que podría al menos mantenerse de pie en la alberca pero él no lo permitió solo la acerco más Abrió los ojos sorprendida —¿Cuál es tu nombre?—Pregunto él volviendo al tono coqueto y lujurioso de hace un momento Ella trago saliva —¿Lo necesitas para llevarme a la cárcel? —Fue imposible que no preguntara, a pesar de sentir miedo de terminar detrás de las rejas su tono de voz fue firme sin intensión de demostrar sus emociones que iban desde deseo hasta miedo No iba a mostrarle cuanto le afectaba Para su sorpresa él se rio, una risa genuina que envió pequeños escalofríos de placer por todo su cuerpo —¿Cárcel? —Pregunto él y ladeo la cabeza como si repente a ella le hubiese crecido otra cabeza Eso la hizo enfurecer, si estaba enojado con ella no tenía porque jugar al gato y al ratón en ese momento, al menos ella sabia lo que le espera, no permitiría que él le metiera miedo solo para satisfacerlo Él pareció darse cuenta de su enojo porque de repente acerco su rostro peligrosamente  al de ella y  agradeció que él la sostuviera de la cintura todavía pues sentía que sus piernas empezaban a debilitarse —Tu nombre —Susurró y ella no pudo ocultar el estremecimiento que la recorrió en ese momento Que más daba si le decía su nombre, igual la tenía atrapada en la prición de sus brazos, de todos modos la llevaría a la cárcel o daría con ella en algún momento Suspirando se rindió —Mi nombre es Chloe Price —Respondió ella bajando su rostro, estaba aceptando su destino —Chloe… —El murmuró y ella se estremeció al escuchar su nombre en sus labios Lentamente levanto su rostro encontrándose con su intensa mirada y el deseo brillar fuertemente en el par de pozos azules, lentamente se estaba derritiendo en los brazos de aquel hombre —Mi nombre es Leandro Galiano —Dijo él, el deseo brillando y mil emociones pasando por sus ojos en ese momento, las misma que ella estaba sintiendo —Sea como sea no pienso llevarte a la cárcel —Dijo Leandro y ella apenas sintió el alivio inundar su cuerpo —Gracias señor Galiano… —Susurró ella aliviada y agradecida de poder haber salido de esta, casi Ya le diría a Lizzie la noche que habia tenido, su amiga le debía una muy grande —Leandro —Le recordó él —Llámame por mi nombre y deseo que me dejes hacer lo mismo con él tuyo, quiero tutearte — Dijo y esperó a que ella asintiera, aunque algo confundida sin entender lo que estaba pasando —Bien Chloe —Dijo lanzándole una sonrisa devastadora, su rostro de por si varios tonos de rojos en algún momento parecería que tenía fiebre o algo —Solo quiero pedirte algo para poder olvidar esta… “Equivocación” en tu primer día en el vecindario Pensaba que ya no podría sonrojarse aun más pero esta noche estaba sobrepasando sus límites al parecer y a juzgar por la encantadora sonrisa en el rostro masculino sabia que él estaba disfrutando del momento —¿Pedirme algo? —Chloe frunció el ceño —Una cita contigo bella Chloe —Murmuró Leandro, sus ojos bajando nuevamente a media hasta dándole una expresión erótica y depredadora al mismo tiempo Ella trago saliva y pensó en su petición Él hombre la intrigaba y hacia que en ella surgiera un deseo como ninguno, eso le preocupaba pues apeas acababa de conocerlo y no en las mejores circunstancias, tenía esta reacción tan poderosa en su cuerpo que la dejaba sin aliento, por otro lado él hombre en vez de llevarla directo a la policía le ofreciendo una cita, la habia salvado en la alberca, de algún modo sentía que debía disculparse mejor con él  y al menos aceptar su petición, “era lo menos que podía hacer” se dijo asi misma ignorando la vocecita en su cabeza que le decía que era una muy mala mentirosa y que todo era una exclusa para permanecer aun cerca del hombre, su experiencia con los hombres era inexistente pues después de haber sido huérfana y luchas por conseguir su titulo se habia dedicado a generar ingresos de algun modo, estuvo tan centrada en ellos que los hombres había sido lo último en su cabeza, era por esa razón que seguia siendo virgen a sus veinte seis años, no era algo que le molestara pues nunca habia sentido esa necesidad tan fuerte que estaba sintiendo por primera vez con el hombre en frente de ella Aun asi no se iba a dejar amilanar por sus deseos y por hecho de que su atracción la intimidaba lo mismo que la hacia  quedarse aun en sus brazos Sin más pensamiento tomo una decisión sin saber que seria más que una cita, que él seria más que un desconocido que la tenía en sus brazos, incluso más que solo un posible amante a largo plazo —Acepto. 
Free reading for new users
Scan code to download app
Facebookexpand_more
  • author-avatar
    Writer
  • chap_listContents
  • likeADD