Enrique. —Sabrina no puede ser. —No tengo salida. —llora negando—. No puedo decir que no o mi hermano va preso toda su vida. —Que tu hermano acepte lo que hizo, no tienes porque pagar por él Sabrina. —desesperado camino detrás de ella donde no deja de ir y venir por todos lados—. Puedo ayudarte. —Es que tu no sabes quien es Pedro. —Un pelotudo que se cree con derecho sobre ti. —Es que no entiendes Enrique, no entiendes que si me alejo va a ir en contra de mi familia, ya lo hizo cuando lo intenté. —quedo en silencio—. Mandó a unos hombres a golpear a mi hermano mayor con su familia y les prendieron fuego su taller de autos, no puedo Enrique. —No puedo creer que vas a soportar esto. —¿A dónde se denuncia a un policía? Dímelo y lo hago pero cuando fui a hacerlo a la comisaria de la mu