Levanta la cara para mirar su rostro y lo que ve hace que las lágrimas le llenen los ojos. — ¿Fiore? Dice al ver esos orbes recuperar su inocente color marrón, mirándolo fijamente. Una amplia sonrisa aparece en sus labios mientras se levanta, tomándose de la cama para acercarse a ella. Mientras Volkan no puede evitar mirarla incrédulo. Era... era imposible... después de la inyección... era imposible que ella despertara... ¿cómo podía estar despierta? Traga saliva avanzando para ver los ojos marrones de su compañera fijos en Daniel. —Th... ¿Thora? Tartamudea. La chica lo mira por un segundo, lo ignora y vuelve a fijar sus ojos en Daniel. Y es ahí cuando Volkan siente cómo se le rompe el corazón. Ella... ella lo odia. Ni siquiera quiere mirarlo. Deberías estar feliz, Volkan... logra