Unos días después Charlotte camina por el pasillo con Bailey siguiéndola de cerca. Sus pasos son pesados mientras aprieta los puños. — ¿Estás segura? —Sí... mi reina. ¿Esa zorra? Está en el calabozo. ¡La vi yo misma! La ira de Charlotte no tiene límites. Ahora sabe por qué Volkan ha estado así con ella todo este tiempo. Es por esa perra. ¡Debe estar follando con ella! Charlotte desea ser la mujer más poderosa del mundo, esa es la razón por la que se casó con Volkan. Pero eso solo es posible si da a luz a un heredero de este reino. Pero, ¿cómo es posible si Volkan anda follando con esa zorra? Han pasado meses y ni siquiera la ha tocado. No le habla, la ignora por completo. Ella intenta seducirlo varias veces, pero él la rechaza, rechaza su cuerpo y sus avances por completo. ¿Por qué