—Ummmhhh.
Sus labios quedan sellados por los suyos dominantes. Sujetándola con una mano, manteniendo sus muñecas por encima de su cabeza, mueve su otra mano debajo de su camisa. Generando chispas que dejan rastro y golpean directamente su núcleo.
Un gemido incontrolable escapa de sus labios.
—Te encanta. ¿Verdad? Pequeña compañera
Dice entre el beso. Moviendo sus labios en el hueco de su cuello, besando el dulce punto sensible.
—Quieres que te marque.
—Ummm s...í
Casi suplica. Su toque encendió el fuego en ella. Su cuerpo es más un títere de él.
Mordiendo la marca, la provoca. Haciendo que su espalda se arquee y sus manos se agiten. Pero él la sujeta, aferrado a ella con fuerza. No permitiéndole moverse ni un centímetro y arruinar su diversión.
Continúa besándola más abajo, dej
