Mientras Isaac hablaba con Miles, Noah no podía evitar tener sus ojos sobre él, admirando sus gestos, apreciando sus rasgos faciales, observando hasta el más mínimo detalle de él. Aquella pequeña revelación que había hecho Isaac sobre sí mismo le advirtió que en verdad tenía algunas cosas en comunes, y no solo eso, que él realmente podía entender cómo se sentía. Cuando le había contado la razón por la cual no podía enfrentar a Petra, no había esperado que este contara una parte de sí mismo, pero se sentía feliz de que Isaac hubiera confiado en él para contarle algo tan importante y que seguramente no se lo contaba a muchas personas a juzgar por la personalidad de este. Las palabras de Isaac, las mismas que había escuchado por parte de Owen una y otra vez, realmente habían entrado en él,