Vitor Ferrari
Ahora estoy parado frente a Stefany con un anillo de diamantes delante de ella, pidiéndole una oportunidad para que nuestro matrimonio funcione. Ella me mira de una manera que no puedo descifrar, parece que están pasando mil pensamientos por minuto en su mente. Sigo mirándola con una sonrisa en mi rostro, pero en el fondo tengo miedo de que diga que no.
Stefany está tan rota. Solo quería tener la oportunidad de intentar estar junto a ella y juntos poder arreglar las cosas, pero eso depende mucho de ella también. Sigo mirando y mis rodillas ya están adoloridas, juro por Dios que mi mano está a punto de caerse.
—Vitor —comienza a hablar—. Estoy... —Se detiene un momento y respira—. ¿Estás seguro? —pregunta.
Veo que tiene cierta desconfianza de que realmente la quiera, pero
