La Acompañante del Alfa

Capítulo 14: Pasión

Dominik no podía creer que ella estuviera allí, cuando la vio llegó a pensar que había sido producto de su imaginación quien le estaba jugando una mala broma, pero no era así. Allí estaba, paseando en los brazos de otro hombre que no era él. La rabia se acumulaba en su cuerpo al solo verla a pocos centímetros de otro, ¿Por qué estaba allí?… ¿Por qué justo ahora?… Pensaba el Alfa que estaba pendiente ante los movimientos de su Soulmate.

Katherine de vez en cuando miraba aquel hombre que le había llamado la atención, se había dado cuenta en algunas ocasiones lo atrapaba mirándola, pero él no lo disimulaba o apartaba la mirada al ser descubierto, Dominik la miraba tan fijamente que hacía que tuviera escalofríos.

— ⟨La luna te ha dado está oportunidad, ¿No lo crees?…⟩ — Le pregunta Axel, su lobo interior estaba igual que él. Celoso de verla con otro hombre y feliz de verla a lo lejos.

— (No me importa, lo que no entiendo es que hace ella aquí.) — Dice enojado.

— ⟨¿Acaso no te importaba?… ¿Por qué tan intenso con ella?⟩ — Dominik no le dice nada.

— (Ya va por su cuarta copa de champán.) — Dominik frunce su ceño ante eso, pero lo que no sabía era que Katherine bebía de manera rápida para sentir el efecto del alcohol en su cuerpo. Ella le encantaba beber, pero sabía cuándo llegaba a su límite y siempre se encontraba consiente de todo lo que hacía, aunque estuviera mareada y riéndose de cosas sin sentido. La mujer de cabello cobrizo sentía que en cualquier momento iba a explotar si seguía con su cliente, ya no lo podía seguir soportando.

— ⟨Eres un hipócrita… y un acosador.⟩ — Le dice Axel con burla haciendo enojar a Dominik.

— (¡Cállate de una vez, mierda!…) — Dominik toma la decisión de acercarse a saludar, con cada paso que daba y se acercaba hacía ella su corazón latía de manera desesperada. El olor que lanzaba Katherine para él era dulce, uno el cual te empalaga, pero aun así quieres seguir oliéndolo sin cansarte.

Era adictivo...

Por primera vez Dominik sentía que le faltaba el aire, estaba al frente de ella... Los dos se miraban fijamente sin decirse nada, ante los ojos del Alfa era simplemente hermosa. Katherine le sonríe ligeramente sin comprender por qué estaba al frente de ella sin decirle nada, solo la miraba. La mujer mueve sus labios, pero Dominik no la escucha... Se había quedado hipnotizado ante su Soulmate…

Una Soulmate que en el fondo quería que fuera de su propia raza...

Un fuerte empujón en el hombro de Dominik ocasiono dos cosas, la primera que volviera a la realidad y la segunda que le tiró encima el champán de Katherine en su vestido. La de cabello rizado hace una mueca al sentir su piel mojada y su vestido que poco a poco se pegaba mucho más a su cuerpo, quien lo había empujado había sido el propio Anton que lo quiso saludar de manera amistosa.

— Perdón... No era mi intención. — Por alguna extraña razón Dominik le hablo en un tono un tanto suave, Katherine solo niega apenada quitándole importancia a lo sucedido.

— No pasa nad... — Katherine no pudo ni terminar lo que quería decir cuando Anton la interrumpió, Dominik al ver esto frunce su ceño molesto.

— ¡Ay, tranquilo, Dominik!, ¡Se puede conseguir miles de vestidos iguales a ese!... ¡Anda vete al baño y haz lo que tengas que hacer!... — Katherine se muerde el labio molesta y deja la copa de champán vacía en una bandeja de uno de los meseros que estaban pasando, ella se da la vuelta y comienza a buscar los baños del enorme salón. Dominik por impulso iba a seguirla, pero Anton lo toma del brazo acercándolo hacia él. — ¡Hey, amigo!... ¡Deja quieta a esa mujerzuela y hablemos de negocios!… ¡Tengo increíbles ofertas que te beneficiarán!

— ⟨¿Dejarás que la insulte?…⟩ — Dominik no quería nada hacer nada porque sabía que estaba en un lugar público, pero Axel no lo pudo aguantar. Dominik ya no controlaba su cuerpo, la mano del Alfa tomo fuertemente de la Anton y este soltó un quejido fuerte.

— Lárgate ahora mismo antes que te haga mierda. — Su voz había sonado ronca y cuando dijo aquellas palabras con tanta rabia y odio Anton tembló. El viejo trago saliva nervioso y asiente con su cabeza para luego irse de allí de manera rápida. — (¿¡Que crees que haces!?) — Le pregunta molesto a su lobo interior.

— ⟨Si tú no la vas a defender entonces lo haré yo... Solo eres un cobarde e hipócrita que no puede aceptar a su Soulmate.⟩ — Las palabras que le dedicaba Axel a Dominik tenían verdad, no podía llegar aceptar por completo a Katherine como su Soulmate… Toda su vida había buscado a su Luna con su propia r**a y ahora la había encontrado en una humana.

(…)

El baño de mujeres no estaba del todo solo, Katherine intentaba secar con un pequeño pañuelo que tenía en su cartera la humedad en su vestido. La mujer que estaba en unos de los cubículos para poder hacer sus necesidades salió de allí para luego lavarse las manos y salir de allí rápidamente, Katherine estaba completamente sola. Se podía escuchar la música desde allí, pero no le importaba.

La puerta nuevamente se abre, pero ella no le presta atención. Con el trapo que tenía se seca la pierna derecha la cual estaba descotada por el vestido azul cielo que tenía puesto, una mano le quita el trapo haciendo que Katherine diera unos pasos hacia atrás por el repentino susto. Cuando levanto su rostro no pudo evitar mostrar sorpresa al observar a Dominik allí dentro de baños de mujeres.

— Disculpe si la asusté y también por entrar al baño de mujeres, pero quería saber si se encontraba bien... Si el vestido se daña puede decirme el montón y yo con mucho gusto se lo p**o. — Dominik se acerca hacia el lavamos y moja solo un poco el pañuelo. — ¿Me permite? — Señala la parte del vestido mojado que estaba justo en su pierna descubierta.

— El vestido tiene arreglo... Creo. — Susurra lo último pensando que no lo había escuchado. — Sí, está bien... — Katherine le permite que la ayude y él se agacha solo un poco y comienza a darle leves toques a la parte del vestido que estaba mojado. — No se debe de disculpar, sé que fue la culpa de Anton.

— ¿Es su pareja?… — Dominik sabía que no eran pareja, pero quería saber que le diría.

— No, me contrato para hacerle compañía en este evento. — El hombre antes de levantarse toca con mucho cuidado la piel de Katherine la cual le dieron escalofríos. El ambiente entre ambos era demasiado tenso, cuando Dominik se levantó sus cuerpos quedaron cerca del otro y se podía notar la clara diferencia de altura que tenían ambos. Ningún despejaba la mirada del otro, Katherine luchaba para no desviar su mirada a los labios del hombre que le parecía de lo más atractivo.

— Me llamo Dominik König… — El corazón del Alfa latía de manera desesperada, el olor de su Soulmate era muy fuerte tanto así que en ese momento quería probar sus labios. En su mente se preguntaba si tendría el mismo sabor que el de su aroma, su lobo interior se encontraba impaciente queriendo también lanzarse encima de él.

— Es un placer conocerte, Dominik...

El Alfa había llegado a su límite de control al escucharla decir su nombre, lo había dicho de una manera tan tranquila, pero tan provocativa que al momento de desviar su mirada a los rosados labios de Katherine no se aguantó y se lanzó a besarla de manera desesperada. La mujer de cabello cobrizo dio unos pasos hacia atrás cuando chocó con él lavamos en dónde Dominik aprovecho y la levantó para sentarla allí, los dos se besaban como si no hubiera un mañana. El poco labial que tenía Katherine se había corrido en la piel de ambos, Dominik se separó solo un poco y observó como la respiración de la de cabello cobrizo se encontraba acelerada.

Katherine por dentro aseguraba que ese había sido el mejor beso que le había dado en muchos años, Dominik lleva una de sus manos hacia el rostro de la mujer que tenía al frente y no puede evitar acariciarlo.

— Discúlpame, no... — Katherine sonríe de lado para luego ser ella quien lo besa, ella no quería desaprovechar el momento de tener un hombre tan atractivo como él, sabía que luego de eso no lo volvería ver jamás en su vida.

O eso pensaba ella...

Dominik al notar que ella también tenía ganas de continuar con el beso lleva sus manos hacia su cintura y jalando su cuerpo hacia el suyo, sus lenguas se mezclaban entre ellas teniendo una guerra por el poder y es el Alfa quien gana jugando con la lengua de Katherine dentro de su cavidad bucal.

La puerta se abre dejando entrar a dos mujeres, los dos se separaron bruscamente y Katherine se bajó del lavamanos con rapidez. Aunque intentarán disimular lo que había pasado una de ellas había visto todo y reconoció a Katherine por la agencia... Ella también trabajaba allí.

La de cabello cobrizo sale con rapidez de allí y Dominik también, pero en el momento en que salió no pudo encontrar a Katherine, ya que ella se había metido entre la multitud y se había ido del lugar apresuradamente.

— (Ella es tan...) — Dominik no pudo terminar de decirlo, ya que se tenía que ir hacia otro lado para calmar la erección que tenía entre sus piernas.