Abrí mis ojos y lo primero que siento es un resaca de los mil demonios. Me duele la cabeza y mi cuerpo está entumecido, trato de levantarme, ¿pero que mierda me está pasando? esto es horrible, jamás volveré a tomar alcohol en mi existencia, me levanto de la cama para ir al baño cruzo la puerta y me miró al espejo... Realmente doy asco, tengo ojeras, mi cabello está enmarañado y ni hablar de mi rostro pálido como el de un muerto... –Carajo, de verdad doy asco– expresé con gran asombro y tocando mi rostro con las manos.
Dejé de verme al espejo y entre a la ducha, un baño de agua muy fría me haría bien, estuve ahí unos 30 minutos y cuando salí fue que me di cuenta que no recordaba como llegué a mi habitación... Me pare en seco, comencé a pensar y la verdad es que todo era borroso desde que C
