—¿Es en serio? Porque una vez te los dejé a cargo y Ollie era el DJ de una fiesta por el cual ni di autorización —responde Melissa con ironía recordándole aquel día muy disgustada. —Jamás creí que presionar botones al azar generaría un sonido bastante movido, ese pequeño tiene talento. Kay se sentía en parte orgulloso porque literalmente el bebé había animado la fiesta. —Y nada más por eso Dione estará con ustedes, ella es muy buena, es graduada en psicología y eso es excelente —halaga Melissa y la mira—. La rebeldía en todas sus etapas me ha pegado como no tienes idea —exclama cansada. —No se preocupe —dice Dione con una sonrisa. —Aguafiestas… —murmura Kay. Melissa le hace un mal gesto y luego besa la frente de cada hijo. —Mamá, si te vas a quedar una semana, ¿por qué estás