Agua Grande. Zona Restringida

Dos Sam

Quedé viendo el sol salir en el horizonte, era un sol naranja y que destellaba luces relajantes, sentía una paz, ese tipo de paz que viene acompañada de angustia. Yo sabía que las cosas se pondrían terribles dentro de poco; peores que en Agua Grande, aún no sé si estoy preparando para eso, morir no está en mis planes y de ser por Max, en estos momentos estaría realmente muerto, eso solo quiere decir una cosa... No puedo sobrevivir solo.

Entonces, de ser así, ¿Cómo lideraré una nación en el fin del mundo? ¿Cómo salvaré personas si yo mismo no sé salvarme? Esa era la angustia que daba presión a mi pecho, la presión de no poder respirar, de no poder salvar a tantas personas inocentes, de tener el poder de salvar a todo el mundo lo haría, pero según Imprus, son pocos los que saldrán con vida. ¿Quién soy yo para salvar vidas de personas que nada tienen que ver conmigo? ¿Por qué yo? Alguien en el más allá, en algún infinito debe controlar mi futuro porque, ¿Cómo es posible que en las visiones de Imprus sea yo el salvador? ¿Cómo es posible que en mis pesadillas sea yo ese líder? ¿Quién ve el futuro y luego lo escribe en las mentes de personas en el pasado o presente? ¿Quién es el controlador de todo eso? Necesito saber la respuesta a esa dos últimas preguntas, de ser alguien físico, en alguna parte del universo, no pararé hasta encontrarlo y preguntarle: ¿Por qué yo? Es una frustración espantosa. Siempre he pensando que las cosas suceden por una razón lógica, que si pasan las cosas es porque así deben suceder, pero, al ver ese póster de yo en el año de 1934, al ver y escuchar de mi desde un pasado remoto, es evidente que algo o alguien ya lo tenía planeado, es que, pondré un ejemplo: supongamos que quiero regar una planta, pero necesito que alguien más lo haga, si quiero que eso sucede de manera espontánea, solo debo dejar la planta en un lugar con mucho sol y a vista muchos, de todos lo que pasan por ese sitio habrá una persona que o la quitará del o la regará, sucedió lo que quería pero sin obligar a nadie eso sería espontáneo, sería algo que sucedió por suceder pero que yo planee, lo otro sería dejar una serie de instrucciones a una persona en específico donde declaro lo que debe y no debe hacer, detalles con hora, cantidad de agua, etc, eso sería destinar a una persona que haga eso. Eso último creo que me está pasando, alguien dejó instrucciones específicamente a mí para que realizara esa labor, pero, ¿Quién? ¿Por qué? ¿Es alguien que me ve y se ríe? ¿O es alguien que quiere saber si puedo lograr esas cosas y más? De ser eso último, ¿Por qué? ¿Por qué ponerme a prueba a mi? ¿Quién soy yo sino un simple muchacho que a penas está descubriendo que es vivir? O a menos que, según aquella sirena, soy un clon de ese tipo del póster, pero de ser un clon de él, ¿Quién escribió lo que debía hacer en el futuro, en este futuro? ¿Preparó él el camino para que yo; "su clon", realizara todo esto de salvar al mundo? Pero igual vuelvo a caer en la misma pregunta: ¿Quién vio ese futuro destruyéndose? Es como que, sí, alguien dió un vistazo al futuro, lo vió todo lleno de zombis y monstruos, destruyéndose y dijo: "bueno, debo preparar a un salvador y enviarlo a ese futuro maldito para que salve a unos cuantos... Ah, listo, será ese tipo si experiencia en supervisión y todo escuálido el que los salvará". ¿Funciona todo eso así de esa manera? Por eso dije al principio de estos pensamientos, que esto era más espantoso que lo que viví en Agua Grande, se me eriza la piel cada vez que pienso en eso, pero debo pensarlo constantemente, creo que eso me mantiene cuerdo o me lleva más a la locura.  

Sam salió de la ducha, venía secando su cabello rojo como el tomate, yo todavía estaba en la terraza viendo el cielo más azul y el sol estaba más despierto. Hacía una sutil brisa que refrescaba y las luces de los anuncios de publicidad se volvían opacos. 

_ Que mal que no dormiste bien, las camas estaban muy cómodas.

_ Si, pero, mis pensamientos han estado inquietos en mi cabeza.

_ ¿Es por lo de ser el líder?_ Preguntó Sam como si supiera todo lo que acabo de pensar, o era tan evidente mi frustración?

_ Sí, todo eso me trae mal psicológicamente, un día quiero seguir y luchar, pero el otro solo quiero estar tranquilo, sin ser parte de esto... Es una pelea contaste conmigo mismo. 

_ Robert, yo creo que no estás obligado hacer nada, solo digo que, en caso de un fin de la humanidad, el ser humano siempre es su propio líder en tiempos dificultosos.

_ Pero por todo lo que he pasado, hemos pasado. 

_ Ve eso como actos de supervivencia, creo que todo lo que hicimos para vivir en Agua Grande, lo haría cualquier humano, ejemplos de ellos están en los Cherezadis, los Gilbinder, Kenser, y muchos otros, es supervivencia Robert. Te veo muy presionado y como científico te digo que eso no es bueno. Si quieres dejar todo esto estás en tu derecho de hacerlo. Ve con tu familia, si quieres comunícate con Zahiro para que te quite ese aparato y vive tranquilo los últimos días de la tierra.

_ ¿Crees que deba hacer eso?_ La idea suena grata, es un consejo de mi amigo y él es muy inteligente. 

_ Es lo mejor para ti, Robert. Aún eres muy joven, y mira por todo lo que has pasado.

_ Hablaré con los muchachos, necesito ver la opinión de los demás.

_ Eso quiere decir que no confías en mí. No es necesario dejar que los demás decidan por ti. Tu solo has logrado todo esto y tú solo puedes decidir lo que debes hacer.

_ ¿Y qué quieres que haga? ¿Qué me vaya sin decir nada a nadie? 

_ Claro amigo. Así se evitan los contra tiempos, tu familia debe de estar anhelando verte. 

En ese preciso momento escuché un ruido que provenía del closet, fue un brusco sonido. Ambos vimos a ese lugar, Max se despertó sentándose en la cama.

_ ¿Pasa algo?_ Preguntó él.

_ No. Robert y yo solo hablamos de cosas de adolescente.

_ Oh, gracias por llamarme viejo_ Dijo Max, levantándose de la cama, él estaba en bóxer y sin camisa.

_ No es mentir, eres tan viejo_ Reímos. 

Entonces, la puerta del closet se abre bruscamente, no era creíble lo que veíamos, estaba amordazado de pie a cabeza, y con los ojos pelados, un Sam...

Los presentes en la habitación estábamos pasmados al ver aquella escena. ¿Cómo era posible que ese Sam, esté amarrado en el closet con un golpe en la cabeza y aquí a nuestro lado esté otra Sam muy tranquilo hablando con nosotros? No teníamos arma alguna en esa habitación, Emma las tenía en su habitación. 

_ ¿Qué coño es esto?_ Interrogó Max. 

Salí a donde el Sam amordazado pero el Sam que estaba a mi lado me dió un golpe con su brazo arrojándome sobre una mesa de vidrio en la sala, el golpe me tonteó un poco, fue como si me hubieran dado un golpe con un tubo de metal. 

Desde donde yo estaba veía perfectamente para donde estaban los demás, Max saltó sobre el Sam que obviamente era falso y le lanzó un golpe pero la cara de Max fue de dolor, era como si sus dedos se hubieran quebrados, como si le hubiera dado un golpe a un muro de concreto. El Sam falso tomó a Max por un brazo y lo giró por el aire lanzándolo contra la puerta del baño destrozado todo. La fuerza que tenía esa cosa era sorprendente. Comenzó a caminar hacia Sam y sacó un arma apuntando a el pelirrojo, yo me levanté rápido sacando fuerzas de mi interior y volví a saltar sobre esa cosa enroscando el cuello de éste para ahorcarlo, lo entretuve evitando que siguiera apuntando a Sam, la cosa comenzó a estrellarme contra la pared para que lo soltara pero yo me aferraba lo más que podía, Sam trataba de levantarse del piso y comenzó a recibir ayuda de Max quien ya estaba en pie. Tomé un porrón de porcelana que estaba en una mesa y comencé a reventar eso en la cabeza del Sam falso, y de pronto ví que debajo de la piel había una especie de metal, ¿Será posible? La cosa me tomó por la nuca y me arrojó sobre la cama, la cosa salió corriendo directo para donde los chicos con el arma frente pero escuchamos una fuerte explosión dentro de la habitación. Un hombre había entrado por la terraza, traía un arma poderosa y comenzó a disparar sobre la criatura, pedazos de metal salían de la criatura, cables y aceite, cuatro disparos certeros en la cabeza y espalda fueron suficientes para aquella cosa cayera despedazada por el piso de la habitación. Mis amigos y yo quedamos paralizados, viendo esa extraña escena.

_ Tienen media hora para alistarse. Este solo fue uno, estoy seguro que vendrán más. 

_ ¿Qué mierda fue todo esto?_ Preguntó Max.

_ Era un robot imitador, puede tomar la forma de quién quiera_ Explicó el hombre.

_ Pero los robots están prohibidos_ Dijo Sam recuperando el aliento.

_ ¿Quién te dijo esa mentira? Me llamo Elliot Cameron, teniente general del Escuadrón Anti Robots de los Estados Unidos. Nuestro deber es cazar estas latas y destruirlos. Desde que quedaron prohibidos, muchas empresas clandestinas siguieron fabricandolos con propósitos malévolos. Rastreamos estés desde que ustedes estaban en el bar, su forma original es desconocida, ya que siempre toman la forma de muchos humanos.

Robots, ¿Es en serio?