Al llegar fin de semana, Eduardo llevó a Olivia al Club Stiw. Un lugar donde se practicaba varios deportes, entre ellos natación. - ¿Tienes tu traje de baño? – preguntó Eduardo en el carro. - No. – respondió Olivia Ella aún no estaba segura de esa idea. Era difícil imaginar volver a tocar el agua. Llevó un traje de baño que estaba dispuesta a utilizar, pero cuando el carro se estacionó frente a las grandes piscinas se retractó. Sin traje de baño no habría clase de natación, tendrían que regresar y desechar esa idea. Eso era lo que ella pensaba. Eduardo llevó la mano hasta uno de los compartimientos del carro, de ahí sacó una bolsa con algo dentro. - Es posible que esto sea de tu talla. – dijo al entregar la prenda en manos de Olivia. No era algo de adivinar, estaba claro que l