Los humanos nacemos soñando. Llegamos a este mundo con los ojos cerrados y los abrimos para poder conocer este plano material en el cual nacimos.
Desafortunadamente, por mucho tiempo asociamos a los sueños al misticismo y muchos temas que le quitaban credibilidad a esta rama de la ciencia, por lo cual, la humanidad se desconectó por completo de la realidad de los sueños, a tal punto que la mayoría de los humanos no soñaban.
No fue hasta que la ciencia comprobó que los sueños eran una parte vital del ser humano que logró establecerse al soñar como una rama de la ciencia y así poder estudiar los sueños a fondo. De esta forma, se logró encontrar la puerta que nos conecta al mundo de los sueños y con ella todos los beneficios y avances para la humanidad.
Al momento de dormir todo ser viviente entra a otra realidad, pero los humanos somos una de las razas que más conciencia crea cuando sueña. Esto lo hemos llamado popularmente como “Sueños vívidos”, donde podemos tomar por completo dominio del lugar y situación en la que estemos en el sueño.
Así que, actualmente se ha normalizado que muchos humanos se vayan de paseo a cualquier parte del mundo por medio de sueños; conozca a otras personas por medio de sus sueños o que trabaje mientras se va a dormir. Y lo mejor es que todo esto lo podemos hacer mientras seguimos en el plano terrenal.
Pero lo más significativo de esto es que los humanos hemos podido encontrar esa otra parte que nos hacía falta. Pudimos entender el por qué estamos aquí y lo importante que es mantener un balance entre nuestro espíritu y cuerpo.
Soy una de las que ha tenido que ver de cerca cómo las personas se esfuerzan por ser felices, porque saben que es la única forma de poder aspirar a estar más cerca de sus raíces: a su plano espiritual. Si una persona está deprimida, se encapsula y pierde su sentido de la vida, por lo cual se desconecta por completo de su plano espiritual, por ende, sus sueños estarán enceguecidos y las pesadillas lo atormentarán.
Así que es normal que en un currículum ya sea para entrar a estudiar o trabajar se pida su historial psicológico, donde se explique a detalle su estado anímico y, sobre todo, qué tanta capacidad tiene para lograr un sueño vívido.
Como el mantenerse saludable mentalmente es tan importante actualmente, es normal que los humanos solo aspiren a tener trabajos donde puedan desempeñarse bien, porque ninguna empresa quiere pagar una indemnización por haber hecho que uno de sus empleados desarrollara depresión o cuadros de ansiedad.
Como humana, creo que la ley que penaliza a las empresas duramente por un precario espacio de trabajo o por horarios exigentes de trabajo sin autorización ha sido fundamental para que toda la humanidad evolucionara para bien, porque de esta forma la pobreza es inexistente y los índices de suicidio prácticamente han desaparecido.
Estoy orgullosa de mi r**a y el poder haber nacido en esta época, donde el oscuro pasado que tuvo que vivir la humanidad solo debo leerlo en los libros de historia.
Y, ante todo, estoy orgullosa de ser una soñadora y poder conectar por completo en mi plano espiritual.
Diario de la Soñadora J. A. Darmy. Año 503 después del Despertar.