A las diez de la mañana pudimos encontrar un lugar donde dormir. Mi hermano rento un pequeño departamento muy cerca de donde esta nuestra casa destruida, solo tiene una pequeña cocina, sala-comedor, baño y dos recamaras, es extraño entrara un lugar donde no tiene absolutamente nada de muebles, se siente un gran vacío y soledad.
Emanuel se ofreció a traernos cobijas y algunos artículos de aseo personal, esta situación es lamentable, no sé en qué momento permití que esto sucediera, me siento tan culpable de haber dejado a mi familia en la calle y sin ningún recurso económico.
-No te preocupes Ivette, todo va a estar bien.- me dijo Emanuel mientras me entregaba algunas bolsas que había traído.
-Muchas gracias por todo esto.- señale con mi dedo las bolsas que tenía en la mano derecha.-Es m
