Victor la carga a través de las escaleras hasta llegar a su lecho matrimonial donde la morena se sorprende pues esta decorado para la ocasión sabanas blancas, el camino en rosas champaña, fresas; con cuidado Victor la deposita en el suelo besa cada centímetro de su piel, deshace su peinado y disfruta viendo caer la melena de su mujer, ella sonríe. Con una delicadeza desconocida para Victor consuma su matrimonio entre miradas cómplices declaraciones de amor. La morena cubre su desnudes con la sabana y observa cada gesto al dormir de su esposo, con las yemas de los dedos delinea su rostro suspira enamorada. -¿Te gusta lo que ves? - susurra con una sonrisa que denota su mas genuina felicidad. -Mucho, te amo y deseo que nada ni nadie dañe nuestra felicidad por nosotros y nuestros hijos.