20. Telaraña
Sara
Me estoy alistando en mi habitación para ir a mi cita. No le avisé ni a mi madre ni a mi hermana que asistiría a la fiesta, pero a esta hora deben estar dormidas y como son de exageradas, de seguro que si les contaba no me iban a dejar. Termino de abrocharme el último arete cuando escucho que tocan a la puerta y me asomo por la mirilla para ver de quién se trata.
—Abre la puerta petit Sara. —La voz sensual de Vana se escucha a través de la puerta. Me apresuro a dejarla de entrar y me asomo a los lados para comprobar que no hay nadie. Es casi como una misión secreta.
—Tardaste mucho francesita. Apúrate. —Ambas soltamos risitas como si hiciéramos una travesura.
—¿Estás lista? —Me pregunta y solo asiento. Se nota que ella va dispuesta a todo con ese chico, pues
