Era el último día del año, Sol y sus amigos lo despedían en una fiesta en el crucero. Antes de acudir a la fiesta, Sol decidió arrancar la pulsera que Luciano le había regalado, significaba el desamor y la desilusión más grande de su vida, con enojo la quitó de su muñeca izquierda y la lanzó al mar, hasta que se hundió. Mientras en Miami, Luciano celebraba al lado de su hermana Vanessa que había ido de visita. Vanessa no veía feliz a su hermano, su cara larga denotaba su amargura por una decisión apresurada y errada. Luciano bebía una copa de vino en el balcón de su apartamento. Últimamente bebía más que de costumbre, justo ahora ya estaba ebrio. Pensaba en Sol, no dejaba de recordarla, aquellos días felices a su lado, anhelaba que volvieran, pero solo era una utopía. Sintió unas mano