Avery se sintió avergonzada y endeble ante lo que había hecho para poder sobrevivir, incluso tuvo la enorme necesidad de llorar y permitir que sus lágrimas lavaran esos sentimientos que la acechaban, culpa, resentimiento y arrepentimiento. Respiro muy profundamente mientras buscaba la delicada tela que cubría su intimidad, no podía perder el control de sus emociones, no cuando al parecer, el mundo se divertía con su debilidad, debia ser mucho más fuerte y soportar lo que viniera, debia sobrevivir. Cuando termino de subirse las bragas, la puerta de la habitación se abrió nuevamente, dos hombres con máscaras de conejo entraron sin llamar a la puerta como si tuvieran la autorización para irrumpir aun así ella estuviera desnuda. Uno de ellos la tomo del brazo y la obligo a caminar, mientras