Capitulo 5

1804 Words
EMILY Me desperté de mejor ánimo que ayer y eso en estos días ya era mucho decir, asique decidí tomar mi desayuno en la terraza de la habitación que daba vista a la playa. Tomando mi café podía admirar la belleza del paisaje y estaba completamente enamorada del lugar, me daba tanta calma y paz. Una vez termine comencé a asearme y elegir que ponerme el día de hoy, elegí un bikini amarillo, es llamativo, pero estaba en camino de descubrir a mi nueva yo y eso implicaba ponerme cosas que antes no haría. Salí del hotel rumbo a la playa, hoy iba a disfrutar el día al máximo, tomar sol, disfrutar del agua y relajarme en semejante paraíso. Ya que la playa estaba frente al hotel no me tomo nada llegar, sentir la calidez de la arena en mis pies y el aroma de la brisa del mar era inigualable, de golpe sentí que aquí podía realmente sanar o al menos ayudarme a hacerlo. Un chico se acercó a mi ofreciéndome una tumbona a lo que yo accedí rápidamente ya que mi idea era pasar gran parte del día aquí. Una vez acomodada el chico me guiño un ojo y se fue, me causo gracia ese gesto, pero me gusto sentirme deseada o al menos pensar que le guste. Antes no me daba cuenta si los hombres me miraban así porque yo solo tenía ojos para Tom y quería que el fuera el único que me mirara. Por un momento quise tomar mi teléfono y revisarlo, pero sentí que en este momento en que me había propuesto relajarme y pasar un hermoso día hacer eso sería masoquista de mi parte, estaba tan metida en mis pensamientos que no me di cuenta de la sombra que me tapaba el sol. -Emily? ¿Todo bien? - Pregunto Maggie parada junto a mí. -Si todo bien, solo estaba distraída. Que haces aquí? ¿No trabajas? -Es mi día franco y la otra semana salgo de vacaciones- Contesto- Marco! Tráeme una para mí. El chico que antes me atendió a mí y que ahora sé que se llama Marco se acercó nuevamente para dejar la tumbona de Maggie. -Conoces a esta princesa? - Pregunto el chico mientras me miraba y sonreía. -Si claro, pero no eres su tipo- Marco sonrió y se marchó. -Asique no es mi tipo- Cuestione divertida. -Por supuesto que no, mira Marco es un amor- Me cuenta- Pero no es hombre de una mujer, más bien es hombre de muchas mujeres para una noche y después ni me acuerdo. De una noche pensé, quizás yo necesitaba eso, hombres de una noche, de golpe la idea de conocer a uno y divertirme no me pareció tan mala o descabellada. -Tierra llamando a Emily- Llamo Maggie. -Si si, asique vas a salir de vacaciones- Pregunte- ¿No te iras a ningún lado? -No, los que trabajamos aquí cuando salimos de vacaciones nos dan la posibilidad de disfrutar del complejo durante quince días- Dice- Y sinceramente antes que mi familia prefiero esto. -Comprendo- Fue lo único que pude decir, entendía el sentimiento con respecto a la familia, en este momento yo no tenía una. Pasamos un buen rato charlando y tomando cocteles, luego decidimos ir un rato al mar y tomar sol. Ella me conto un poco de su vida aquí y yo le conté como llegué a este lugar y lo que ella ya sabía, también le conté mis dos encuentros con ese desagradable y horrible hombre y Maggie no paro de reír con mi relato. -Máximo! - Grito Maggie de golpe mientras movía las manos- Emily ven voy a presentarte un amigo. -De acuerdo- Dije mientras me levantaba de la Tumbona. No podía distinguir a lo lejos al hombre que había salido del agua y comenzaba a caminar junto al otro que rápido distinguí- ¡Dios no puede ser! ¡No puedo tener tan mala suerte! -Emily que sucede? - Maggie se quedó mirando a los chicos que habían quedado estáticos mirando- Que pasa? ¿Se conocen? -La fiera- Dijo Máximo y comenzó a reír ante la situación que se había presentado. -Otra vez tu- Dije mirando fijamente a Henry, de tantos lugares aquí, de nuevo tenía que encontrármelo ya casi parecía a propósito. -Así es, yo- Dijo con una sonrisa arrogante- ¿No querrás una disculpa de nuevo no? O derramarme alguna bebida? Hay que ir con cuidado contigo niña. -Que simpático- Dije con una falsa sonrisa- Pero tranquilo que puedo pedirla enseguida. -Esto es increíble! - Comenzó a reír Maggie- No me digas que él es el que te tiro en la calle y al que luego te chocaste en la fiesta? -Si- Mire fijamente al hombre frente a mí- El mismo arrogante. -Ay por dios yo no soy arrogante, en cambio tu niña...- Deslizo. -Disculpa? - Dije comenzando a enojarme mientras caminaba hacia él. -Chicos tranquilos, que haya paz- Se metió Maggie entre ambos. -Definitivamente esto se va a poner divertido- Dijo Máximo, el amigo del arrogante. -Mejor me voy al agua- Dije ignorando a esos dos, quería calma y esos dos ya me lo estaba poniendo complicado. Los tres se habían quedado charlando mientras yo me iba al agua, parecían entenderse bastante bien por lo que supuse que hace tiempo deben ser amigos. -Esta buena el agua- Me gire para encontrarme con un Henry sonriente- No te parece Emily? -Como sabes mi nombre? -Eso no importa- Me miraba fijamente- Podemos empezar de nuevo no crees? -Y como se supone que eso pasara? - Lo mire detalladamente y tenía que ser un espectáculo de hombre el condenado. Cuerpo musculoso y definido, un rostro tallado por los mismos dioses y unos ojos azules que serían la condena de cualquier mujer, con ojos y buen gusto. -Hola hermosa, me llamo Henry- Me tendió la mano- ¿Y tú? -Emily- Conteste dándole la mano- Y no me llames hermosa. -Pero lo eres! ¿Porque te molesta? - Sonrió- Si te digo niña arrogante te enojas, si te digo hermosa te enojas. ¿Entonces cómo te llamo? -Muy simple, no me llames- Dije tirando de su mano y provocando que se caiga al agua. -Qué demonios sucede contigo? - Grito, con el ceño fruncido. -Un placer conocerte Henry- Comencé a salir del agua, pero me gire para mirarlo- O al menos eso me gustaría decir. Terminé de salir y me dirigí a la tumbona donde comencé a secarme con la toalla, una vez lista recogí mis cosas para irme, Máximo me sonrió y me saludo. Maggie me intercepto en el camino a la habitación y me acompaño. -No te agrada mucho Henry verdad? - Pregunto luego de un rato- Es un buen hombre créeme. -Seguro- Seguí caminando- Un hombre engreído y arrogante? ¿Qué hace? -Es chef tiene un restaurante cerca de aquí- Me mira- Engreído y arrogante? ¿En serio Emily? -Si! - Me encojo de hombros frente a mi habitación- Supongo que la opinión que tengo de los hombres en este momento y de el en particular no es la mejor. Maggie se ríe ante mi comentario y nos despedimos, entro dispuesta tomar una ducha y dormir un poco. Sin poder dormir pensaba realmente lo que había dicho, es decir, si, nuestros encuentros no habían sido de los más afortunados y su comportamiento no había sido el mejor, pero en verdad no lo conocía para nada. ¿Acaso me estaba desquitando con el todo el malestar que sentía? ¿Porque me provocaba tanto rechazo? Miré hacia mi mesita de noche y vi mi teléfono tentada a mirarlo y hacer lo que no hice antes, lo encendí y una vez que lo hice los mensajes y las llamadas comenzaron a caer. Tenía llamadas de mi tía, mi amiga, de Tom incluso de mi suegro, sin embargo, una llamada de Becca fue la que más me sorprendió, no podía creer que se atreviera a hacerlo. El primero que leí fue el de mi amiga Cristina que estaba sumamente preocupada y ahí caí e cuenta que me fui y no le dije nada. Cristina [10:20]: ¡Amiga! No doy más de la preocupación por favor llámame, ¡no sé lo que paso y me estoy volviendo loca! Solo déjame saber que estas bien. Cristina [22:45]: Emily por dios da señales de vida, ya estoy pensando lo peor. Cristina [13:15]: ¿Mierda porque no contestas ni respondes las llamadas? ¿Dónde carajos te metiste? ¿Qué pasa Emily? Tu prima no me dice nada, tu tía solo llora y Tom, bueno el parece que ha perdido la cabeza y anda como un demente buscándote por toda la maldita ciudad. Por favor, por favor llámame cuando veas esto. Suspiré por el desastre en lo que se había convertido todo y aunque si me sentí mal por mi tía y ella, un destello de felicidad me dio saber que al menos ellos tampoco la estaban pasando de maravillas. El siguiente que leí fue de Tom y me arrepentí al instante. De Tom [8:40]: Mi amor por favor, te amo y te necesito no me hagas esto. Se y entiendo que estas enojada, pero vuelve y se te pasara, eso no significo nada para mí. Te prometo que no se repetirá y seremos felices como siempre soñamos. Te estaré esperando. De Tom [8:41]: Emily por favor recapacita, piensa bien las cosas. Fui débil lo sé y no pude controlarme, pero fue un error. Yo te amo a ti y no hay otra mujer con la que quiera pasar el resto de mi vida, solo eres tú. Estamos casados, regresa a mí. De Tom [8:43]: Por un demonio Emily no puedes huir para siempre, regresa conmigo a nuestra casa, soy tu esposo ahora. ¿No piensas en que vas a decir la gente? No puedes irte y dejarlo todo así. De Tom [19:00]: ¡Dios Emily estoy viviendo un infierno! ¿No te importa? ¡Yo te quiero! ¿Es que acaso no has sido feliz durante estos años conmigo? ¿No puedes perdonarme un simple error? soy hombre y te di tu tiempo como me la habías pedido. Esto tiene una explicación, contéstame. De Tom [19:30]: Te encontrare y no podrás seguir escapando de mi Emily, ¿lo sabes no?, estamos casados y somos una familia ahora. Vamos a afrontar todo esto juntos como corresponde. No pude aguantar las lágrimas, volví a apagar el teléfono dejándolo muy en el fondo del cajón de la mesita de noche. No necesitaba más de esa basura que lo único que provoco es volver a dañarme. Si él estaba dispuesto a encontrarme yo no haría nada por impedirlo y cuando lo hiciera, cuando ese momento llegara se arrepentiría de lo que hiso y las estupideces que dijo. De mí no se burlaría nunca más…
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