Cuando me desperté la imagen del hombre que tenía al lado me quito la respiración, se veía perfecto hasta durmiendo ¿es acaso eso posible? Seguía sin poder creer que me había acostado con él. Fue más de lo que en algún momento llegue a fantasear y seguía acá. ¿Porque no se fue? No podía dejar de mirarlo, su espectacular cuerpo, su rostro perfecto, ese mechón de pelo que caía sobre su frente. Sabía que el golpe de realidad me iba a llegar en cualquier momento, pero ahora no me iba a preocupar por eso, solo iba a disfrutar de lo que pasara. -Si me sigues mirando así me vas a gastar- Me dijo con los ojos aun cerrados. -Perdón, no sabía que estabas despierto- Le dije avergonzada- No quería mirarte tan fijamente. -No te preocupes, me desperté hace rato y me desvelé mirándote de la misma f