—Lo siento Ana—manifiesta Tony muy apenado, por su reacción. —Tony—balbucea Ana, con la respiración entre cortada. —Ana discúlpame de verdad, no quiero que pienses, que me quiero aprovechar de ti—ladea la cabeza con mucha intranquilidad. —Me gusto—musita Ana, sin poder todavía creer, lo que había ocurrido entre ellos. —Ay Anita—susurra Tony y besa su frente. —Las palabras sobraron—dice Ana. Tony la toma entre brazos con mucha ansiedad, no fue su intención besarla como lo hizo, solo siguió a su instinto, que lo motivo hacerlo. No pretende jugar con la muchacha, siente mucha culpa por su confusión. Desconoce todavía, que es lo que está sintiendo por Ana, sin embargo, desde ya siente que la dulce Ana, despierta emociones nuevas en él, que solo había provocado en su momento su difunda es