SOY SOBREVIVIENTE

1993 Words
NARRA JIA LEE PARK —¡Por tu maldita culpa es que estamos en este asqueroso y mugriento lugar! No entiendo como fuiste capaz de hacernos esto —eran uno de los tantos comentarios que recibía, mientras recibía golpe tras golpe de parte del hombre que prometió amarme para toda la vida; un hombre que prometió cuidarme desde el momento que corte toda relación con mi familia por él. No es nuevo saber que muchas culturas se rigen de manera diferente y yo provengo de una muy tradicional. Mi padre en ese entonces era un embajador de Pekin, China. Sus negocios son muy importantes a nivel mundial. En una fiesta diplomática, donde me presentaría ante la sociedad por haber llegado a la mayoría de edad, fue que conocí al bastard0 que tengo como esposo. Me enamoré de una fantasía. Desde niña, siempre soñé con encontrar a un príncipe y en este caso fue un duque. No todo fue malo, pero ahora llamarlo por su nombre es hablar bien de él. Lo único bueno que me ha dado han sido mis hijos Susana y Argus. —¡Fuiste tu quien permitió que todo esto pasara! Deja de culparme por algo que tú tienes la culpa. Me regalaste al rey, sin antes ver las consecuencias de todo. Al menos le hubieras aconsejado que usara un condón —logré decir cuando lo vi caer de borracho sobre la cama, mientras yo intentaba levantarme del suelo. Para mi suerte, mis palabras no trajeron consecuencias, ya que sus ronquidos segundos después de decirlas me dieron paz haciéndome saber que se había dormido. Cada vez la situación era peor que la anterior. Tenía mucho miedo a que termináramos muertos por culpa de sus golpes. Caminé lentamente con mi mano sobre mis costillas a causa del dolor que sentía en esa área de mi cuerpo. Sali de mi habitación y fui hasta donde dormían mis hijos para asegurarme que el escándalo no perturbara su sueño. Una vez que vi como mi Susy tenía de Tiam abrazado me quede tranquila. Mi hija Susy era una joya, podía decir que ella me ha dado el ánimo y coraje de hacer muchas cosas. Solo deseo que mi pequeña pueda tener una vida muy distinta a la mía. Fui al baño para poder observar un poco mis golpes y afortunadamente mi rostro solo muestra sangre saliendo de mi nariz y un poco salir de mi labio inferior el cual también esta partido. Con un poco de agua del grifo limpio la sangre de mi rostro. Levanto mi camisa y veo rojo en el área de mis costillas. No creo que me haya quebrado una costilla porque el dolor es tolerable. Saco las cremas que me regalo la doctora Bianca para que no se noten mucho los golpes. Me tomo un antinflamatorio y me recuesto en una pequeña silla a un lado de Argus. Me cubro con una cobija y cuando estoy por quedarme dormida siento que alguien toma mi mano y la aprieta fuerte. Mantuve cerrados los ojos deseando que no se tratara del padre de mis hijos. —Ya no te pegaran más mamá. Ya no permitiré que te vuelva a pegar. Lo mataré si es la única manera en que podamos volver a vivir sin gritos y golpes —escuché decir a mi hijo. Fue imposible evitar que las lágrimas comenzaran a hacerse presente después de lo que acaba de escuchar. Me dolió que Argus tuviera ese tipo de pensamientos en contra de su padre. Me sentía una mala madre porque no era este el ejemplo de padre que quería darle a ms hijos. Abrí mis ojos y él se quiso volver a hacer el dormido, pero sostuve su mano evitando que se alejara. —Perdóname, por tener que vivir todo esto —dije y él se quedó sorprendido, pero se acomodó a quedar sentando frente a mí y me limpió las lágrimas. —No es culpa tuya. No sé de qué te culpa siempre. La verdad que no deseo que te lastime —comenta con lágrimas en sus ojos. No es correcto que le cuente mi historia. Mi hijo apenas tiene 15 años, pero es la única manera que pueda entender. —Escuché lo último que le dijiste. Ya soy mayor mamá, puedes contar conmigo —suspiré nuevamente no lo creía, pero ya no podía rodear su pregunta si el escucho lo último que dije. —No es fácil para mi contar esto hijo, pero creo que es necesario para que entiendas el porqué de toda esta situación —tomé sus dos manos y lo miré fijamente a los ojos—. Tiam es hijo del rey de Malib. Lo primero que hace fue verme sorprendido y quitar sus manos de mi agarre. No le di tiempo a pensar o decir nada porque continue con mi relato. -Recuerdo- —No me siento bien An —le dije a mi esposo. —Acabamos de llegar, me hubieras dicho que te sentías mal desde que veníamos y te quedabas en casa —replica molesto. —Estaba bien hace un momento. Creo que el alcohol me hizo efecto muy rápido. —Imposible, solo te has tomado una copa —replico el algo molesto—. Estoy seguro que lo estás haciendo para hacer que nos vayamos y no verme hablar con mis amistades. Negue ante sus acusaciones. —¿Todo bien por aquí? —se acerca el rey a preguntarnos. —Su majestad todo está bien, es Jia que se siente un poco mal. Creo que es mejor que nos retiremos. —De ninguna manera. En el palacio hay muchas habitaciones no necesitan retirarse. Posiblemente sea un malestar pasajero. La fiesta acaba de comenzar y la gente hablara si ustedes se retiran cuando acaban de llegar. Louise, prepara una habitación para que descanse la señora. —Enseguida señor. —No queremos causarle molestias o abusar de su hospitalidad majestad. Mejor nosotros nos retiramos —comentó mi esposo. —No es una molestia, Louise les enseñara el lugar y cuando ya estes descansando me gustaría platicar contigo. —Como usted ordene majestad —el imponente hombre se va dejándonos algo sorprendidos. —Ya escuchaste al rey. Esperamos unos minutos hasta que llegó el mayordomo del rey y me encamino hasta la habitación. Donde ya sentía que mi cuerpo se iba apagando lentamente. Llegue a la cama y me quede dormida. No sé en qué momento exactamente comencé a sentir una grandes y tibias manos tocarme. Sentía mis ojos muy pesados para abrirlos, así que no puse resistencia creyendo que se trataba de mi esposo. La mañana llegó y con ella el desastre. —¡Maldita zorra! Te abrí las puertas de mi casa ¿y así es como me pagas? Queriéndome robar a mi marido. ¡GUARDIAS! —comenzó a gritar la reina haciéndome despertar de golpe. Miro al hombre que está a mi lado y pegué un grito al ver que se trataba del rey. Rápidamente busque mi ropa y corrí al baño. Ellos intercambiaron palabras he insultos, pero no yo entendía que era lo que estaba pasando. La habitación quedó en silencio y fue en ese momento que decidí salir del baño. Mi esposo estaba sentado en una silla a un lado de la cama. Me miro con seriedad y lo único que me dijo fue. —Vámonos. Pasaron algunos meses y descubrí que estaba embarazada. Yo estaba muerta de miedo porque no sabía si ese bebé era hijo de mi esposo o si era resultado de esa noche. La duda estaba, pero era casi imposible que así fuera. Andrew había tenido un accidente mientras jugaba polo y el golpe lo había dejado estéril según los médicos. Fue un año después del nacimiento de Argus por lo que no utilizábamos ningún método y no volví a salir embarazada hasta ese momento. —No hay problema, vas a tener a ese niño —dijo con bastante desinterés. Nuestra relación no había vuelto hacer la misma por obvias razones, pero ese mismo día lo que descubrí fue lo que más me lastimo. —Esta embarazada —le escuche decir por teléfono. —¡Ese no fue el trato! Te di a mi esposa, soy el hazme reír del reino por culpa de todo esto. -Fin del recuerdo- —Fue así que supe que tu padre fue que se puso de acuerdo con el rey para que eso sucediera. Cuando Tiam nació, las personas hablaban del parecido entre el rey y el. Eso llegó a oídos de la reina y nos sacaron del país de una manera muy cruel. Eso fue lo que hizo que todo esto sucediera —concluí —¡Es un desgraciado! —exclamó apretando su mano. —Ya no pienses en eso, mañana es un nuevo día y el cumpleaños de tu hermana. Debes mantener esto como nuestro secreto mi niño —dije acariciando su mejilla. El asintió y ambos nos volvimos a acomodar para dormir hasta que el sol saliera nuevamente. Mi Susy salió temprano como todas las mañanas. Yo me quedé en la casa y agradecía que Andrew siguiera dormido. Pasadas las 2 de la tarde el salió de la habitación directamente a buscar agua y comida. Camino a la cocina se tropezó con un juguete de Tiam y el busco a mi hijo con furia en sus ojos, dio unos pasos era seguro que estaba por golpearlo. Corrí a auxiliar a mi hijo, pero antes de que pudiera llegar a su lado Argus se había puesto de espaldas abrazando a Tiam. Aguantando el golpe sobre su espalda. Argus gimió de dolor, pero no soltó a Tiam. Dándome tiempo suficiente para que pudiera llegar a ellos. —¡En tu vida le vuelves a poner una mano encima a mis hijos! —grité pegándole una cachetada en su rostro. Cuando se recuperó de mi golpe pude ver el fuego en sus ojos. La furia con la que me miraba. Levantó su mano y me golpeó, fue un golpe tan fuerte que caí inconsciente al suelo, rogando por la seguridad de mis hijos. —Mamá. Lo maté, lo maté —dijo mi hija cuando logre recuperar la conciencia. Miré el cuerpo inconsciente de Andrew tirado en el suelo. Sabía que esta era la gota que derramó el vaso y lo confirme después de ver el cuello enrojecido de Argus y a Tiam cubriendo sus oídos; sentado en el mueble. Le pedí a Susy que tomará una mochila y pusiera las cosas esenciales. Llegamos a pedirle ayuda a la doctora Bianca y atreves de ella nos comunicamos con un abogado que se ofreció en ayudarnos. La ayuda no tardó en llegar y estaba más que agradecida por todo lo que estas hermosas personas estaban haciendo por nosotros. Así fue como comenzó nuestro proceso a la estabilidad física y emocional. —¿Estas lista? —me pregunta Mary, la esposa del abogado Jaime. señalándome la puerta de vidrio donde se pueden apreciar varias mujeres. —Pasa toma asiento. Me estaba presentando —dice con una sonrisa la mujer señalándome un asiento vacío. Con algo de temor y timidez entre y me senté. —Yo soy Cecilia Amador, psicóloga. Lo primero que haremos es presentarnos y hablar de lo que nos pasó. Por ejemplo. Hola, soy Cecilia y soy sobreviviente de... y dicen a que han sobrevivido. Comencemos por este lado —comenta viéndome a mí. Ella se sentó y yo me puse de pie. —Hola, mi nombre es Jia Lee Park y soy sobreviviente de violencia doméstica. ---------------------- Bienvenid@s a esta nueva historia llena de muchas emociones. Esta historia se actualizará con un día de por medio. (DIA SI Y DIA NO) Por lo tanto nos leeremos por aquí el jueves. Mañana nos leeremos en “LAS LEYES DE UN AMOR INCONDICIONAL” -------------------- Copyright © 2023 Valery Archaga Todos los derechos reservados. Obra protegida por Safe Creative bajo el número 2307154839257
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