Samira Roldán Son incontables las horas que paso acostada en mi cama, mirando hacia el techo. Repaso una y otra vez la escena tratando de comprender cómo es que no me di cuenta, cómo es que dejé que todo esto pasara. ¿Acaso soy una mala persona? ¿Me merecía se engañada de la forma más cruel, solo por ser gorda? Él es un hombre malo, uno muy malo. Le di años de mi vida, le di todo lo que podía darle con tal de que me amara así como soy, ¿y qué recibo a cambio? Ser engañada durante tantos años por él, dormir en la misma cama donde estuvieron muchas mujeres delgadas, bonitas. Que idiota fui al creer que un hombre como él, realmente estaría enamorado de una mujer como yo. Los hombres como él, de cara bonita, cuerpo trabajado, que lo tienen todo, jamás, jamás en la vida se enamoran de muje