POV Alessandro. —¿Sabes el significado del respeto y la privacidad? —cuestioné enojado, aun no podía creer lo que hizo. Amelia había entrado a mi casa y lo peor, entrado a mi habitación en plena mañana gracias a la copia que aun guardaba, pensé que ya no la tenía en su poder y he aquí la sorpresa que sí. Cuando sentí a alguien a mi lado realmente me asusté, llevaba mucho tiempo durmiendo solo y era obvio que no podría ser Maia. Ahora nos encontrábamos en la cocina, estar en la habitación era una zona de peligro y sabia muy bien que ella utilizaría todas sus cartas. —No te enojes, Alessandro —me abrazó por detrás, reposando su rostro en mi espalda. Me tensé de inmediato y pensé en Maia y en lo mucho en que no le gustaba que estuviera con ella. No debía de tener este tipo de contacto—