CAPÍTULO 58: ¿SÍ O NO? Artem caminaba de un lado al otro de la sala como un león enjaulado; cada segundo que pasaba le hacía sentir que el tiempo se le escurría entre los dedos. Las palabras de Stefano resonaban en su cabeza: Víctor planea sacarla del país en horas. No podía perder a Liana. No quería perderla. Por otro lado, el recuerdo de lo que le había dicho antes lo atormentaba, esas estúpidas palabras que soltó: «No eres Susana». Él, más que nadie, sabía que no era Susana, pero esa verdad le dolía menos que enfrentar lo que Liana realmente significaba para él. Liana no solo era diferente, era más. Se había colado en su vida de una forma que Susana nunca lo había hecho. Liana lo había desafiado, lo había enfrentado, y ahora... ella era lo único que importaba. De repente, la puerta