Era evidente que acababa de soltar veneno, me moví un poco incómoda debido a su comentario, solo quería que salieran de mi vista y que se fueran a alguna esquina a beberse en vino hasta perder la conciencia como era su costumbre. —Los rumores en ocasiones suelen ser provocados por la envidia. Ella rió antes de decir. —Incluso se cuestionaban tus preferencias sexuales—si hubiera tenido algo en la boca posiblemente lo hubiese escupido, vaya comentario, el silencio incómodo fue roto por el sonido de mi risa. Esto era increible. —Si de algo estoy segura es que me gustan los hombres—repliqué rápidamente aun riendo por el comentario, observe discretamente el reloj buscando un pretexto para desaparecer de aquella burbuja incomoda que se había formado alrededor. Al mirar a un costado observe a