Yo estaba nerviosa. Buscaba en mi celular cada 5 minutos si había alguna noticia como “Carlos Orejuela le quita la mujer a su hermano” o algo por el estilo, pero no había todavía nada. Puede que Carlos tal vez haya mandado a callar a todos los que estaban en la pista de aterrizaje del aeropuerto militar y vieron ese fogoso reencuentro, pero yo sabía que era cuestión de tiempo para que a algunos se le soltara la lengua con algún familiar y amigo, y que esa persona fuera la que diera a conocer tan jugoso chisme. Así que, antes de que tal vez todo se fuera a la mierda con Fernando por ese asunto, preferí confesárselo, antes de que la bomba estallara y fuera toda una sorpresa para él, y yo sabía que era un mal momento, porque él aún seguía en shock, apenas procesando la noticia de que t