Cal se despertó en una habitación muy extraña, las paredes eran blancas y la decoración muy peculiar. Las cortinas eran simples y de color azul gris. Los muebles también eran muy sencillos de color gris y lisos, sin ninguna decoración tallada sobre de ellos. Cal nunca había visto madera color gris. El piso era brillante, muy parecido al marfil pero muy pulido. Luego vió un especie de espejo grande que mostraba a personas haciendo cosas dentro de él. No entendía el idioma en el que hablaban. La cama también era muy extraña, las sábanas eran muy simples y lisas, las almohadas eran blancas y sin decoración alguna. Estuvo un rato contemplando el lugar con curiosidad, luego vió dos puertas ahí. Abrió una y vió una extraña cosa blanca empotrada en el suelo muy limpia y muy parecida a una