Meridia no podía creer lo que estaba oyendo, cuando Axel le dijo que ella era su compañera de vida. Por un instante la elfa pensó que había escuchado mal, es por eso que se acercó a él diciendo:
—Axel… ¿Qué has dicho? —pregunta Meridia porque deseaba oírlo nuevamente.
—¿Estas sorda, elfa? Ya me has preguntado dos veces —admite Axel riéndose un poco sin poderlo evitar —dije que te amo, y que te he escogido como mi compañera de vida. Eso es algo de lobos que mas adelante comprenderás… pero eso significa que serás mía para siempre —admite Axel colocando sus manos sobre las mejillas de Meridia, viendo como sus manos eran mas grandes que el rostro de la chica.
—Axel… yo… —la joven se detiene por un instante tragando saliva, porque no sabía como confesarse de igual forma, era su primera vez y
