WILLIAM
— ¡¿Qué acabas de hacer que?!
— Shhh, James baja la voz.
— No puedo creerlo. Hermano, ¿estás loco? ¿seguro que no te golpeaste la cabeza? ¿Y qué pasa si cuando llegues a tu casa la encuentras desvalijada?
— La deje encerrada y active el sistema de seguridad. Si intenta abrir alguna puerta o ventana se activará la alarma y mi teléfono me notificará. Lo hablé primero con ella y dijo que si eso me hacía sentir mejor que lo hiciera pero me dio su palabra de no ser una ladrona. Aunque me confesó haber estado hace un mes en la cárcel porque un cliente no quiso pagarle y él la acusó de robarle un reloj y que su proxeneta la sacó y le estaba cobrando esa plata cuando huyó.
— ¿Y le creíste?
— ¿Porque inventaría algo así? Le estoy dando el beneficio de la duda, además deje algunas cosas de valor mal puestas intencionalmente para probarla. Normalmente nadie se resistiría a tomar algo.
— Bueno, dejando de lado que ahora debes tener una mucama sexy y ladrona.
Caroline White de la clínica de fertilidad me llamó anoche, dice que te estuvo marcando a tu casa ya que ese fue el único número que le dio Sara de ti y como no te localizo me marcó a mi. Dice que te agendo una cita para pasado mañana a las 12, que cuando llegues a la clínica preguntes por ella.
— ¿De verdad?¿Tan pronto? Gracias amigo. Ahi estare
— Bien, nos vemos después Willy, debo asistir a una cirugía de emergencia.
— Adios amigo. Y por favor, no andes contando a nadie sobre mi nueva trabajadora doméstica.
— Sabes que soy una tumba.
— Si, una que a veces es abierta y saqueada.
Hizo un gesto agarrándose el pecho, como si le atravesaran el corazón mis palabras y empezamos a reír.
— Adiós James
_______________
Elizabeth
La casa del doctor es muy bonita y bastante grande para solo una persona. Tiene un jardín delantero muy bonito y en el patio trasero tiene una pequeña terraza y una piscina.
Es una casa de dos niveles, en la planta inferior está el recibidor con un armario para abrigos, la sala de estar tiene muebles modernos en piel negra, una estantería con libros y una pantalla de 50 pulgadas con teatro en casa.
La cocina es grande, con electrodomésticos modernos en tonos metálicos, la encimera y la isla de granito color n***o. Era la cocina soñada de cualquier señora.
Ahí mismo en la planta baja está una alacena y el cuarto de lavado y frente a este está la habitación de servicio.
El cual será mi cuarto.
Este es pequeño pero acogedor, tiene su baño propio y eso me gusta, además tendré un pequeño armario, una cómoda y mesita de noche. La verdad, es más de lo que esperaba.
En la planta alta hay otras dos habitaciones, ambas con baño privado.
La recámara principal es más grande, donde él duerme, su cama es king size de caoba, su tocador y ropero estaban a juego también en caoba.
Y las paredes pintadas en tono menta lo hacían relajante.
Tiene un enorme vestidor que está a la mitad con su ropa y su baño tiene un jacuzzi.
La casa es un poco grande y si estaba hecha un desastre, pero tendría todo el tiempo del mundo para limpiar, no es que tuviera otra cosa que hacer.
mi teléfono no había dejado de sonar, y todas eran llamadas de "Madame" michell. La que después de 3 días se había dado cuenta que su "baby" no iba a volver.
¿Cuando se había convertido en mi proxeneta?
Cuando supuestamente se acercó a Penny y a mi para encontrarnos un lugar donde vivir luego de ser echadas muchas veces de dónde alquilamos. Confiar en ella fue nuestro error.
¿Podría librarme por completo de ella?
Me inundaba por ratos la paranoia de que me tuviera vigilada y me viniera a buscar a rastras para meterme de nuevo en su agujero.
No quería pensar en eso. Quizá lo mejor será cambiar de número.
Comencé por acomodar mi pequeña habitación, guarde la ropa donada en el armario junto con mis documentos y busque los utensilios de limpieza, había mucho polvo acumulado y se sentía olor a humedad en las habitaciones, hubiera abierto las ventanas de todas las habitaciones si él no hubiera activado su alarma.
Después de mi pequeño cuarto, decidí limpiar su alacena, que lastimosamente tenía algunos productos caducados desde hacía un mes. ¿Cuánto tiempo lleva solo este hombre?
Me la pase limpiando toda la tarde, que cuando me di cuenta, ya eran las ocho de la noche y aun me faltaba limpiar el segundo piso. Eso lo dejaría para mañana. Guarde los utensilios de limpieza, me lave y prepare la cena, no se que es lo que coma este señor, pero se ve que se cuida mucho, así que supongo que no come cosas fritas.
Busqué entre sus libros para ver si había algún recetario o algo así, pero solo encontré libros de medicina. Frustrada decidí que echaría un vistazo al refrigerador e improvisaría.
Afortunadamente le entendí a su horno, tenía todos los ingredientes que necesitaba para una lasaña, se que es un poco grasosa y no se si se la vaya a comer, pero es una manera de agradecer por dejarme quedar en su casa.
Dejé que la lasaña se enfriará y me metí a la ducha, me puse una camiseta larga y unos shorts que había entre la ropa que me habían dado.
Miré el reloj, eran las 10 p.m y el aun no volvía.
¿Cuánto tiempo trabaja este hombre? Con razón no tiene novia, nunca está en su casa. Hasta cierto punto, tiene una vida solitaria, en eso nos parecemos un poco.
Me senté en el sofá para esperar a que llegara y me quedé dormida.
________
William
Tuve una jornada agotadora, operé a una chica con aneurisma cerebral, que fue bastante complicado porque no localizaba el sitio exacto de la hemorragia, lo que al final terminó resultando en tres aneurismas. Cuando me di cuenta, era media noche y yo seguía operando.
De inmediato pensé en la pobre chica que dejé encerrada en mi casa y me sentí culpable, al menos le hubiera dejado abierto el acceso a la piscina, no es que pudiera escapar por el patio.
Cuando al fin termine mis pendientes, eran las 6 de la mañana. Había hecho dos turnos, estaba cansado y quería ir a casa, nuevamente recordé que había dejado a Elizabeth sola toda la noche y encerrada me sentí terrible, ¡demonios! Por eso estoy solo, no se como tratar a las mujeres.
Salí rumbo al checador y después hacia mi auto, quería llegar a casa.
_________
Elizabeth
Me desperté con dolor en el cuello.
¡carajo! Me quede dormida en el sofá y no en esa cama que se ve tan suave.
¿Por qué el doctor no me despertó?
Miré hacia la cocina y ahí estaba la lasaña intacta, subí a su habitación y su cama estaba hecha.
No había venido a su casa a dormir.
¿En serio trabajó más de 12 horas?¿Habrá pasado la noche con alguna amiguita? No era algo que me importara pero era curiosidad.
Bajé nuevamente y fui a mi habitación a ducharme. Decidí calentar nuevamente la lasaña con la esperanza de que viniera temprano. Mi estómago empezó a rugir, eso me recordó que ayer solo había comido una vez, el desayuno que él me invitó. Estaba tan acostumbrada a pasar hambre que para mi eso era normal, decidí tomar agua para saciar la sensación de hambre y esperaría hasta las 10, si no llegaba a esa hora, entonces comería sin él.
_________
William
Conduje lo más rápido que pude(sin infracciones), quería acostarme a dormir, tuve una noche larga y me dolía la cabeza, tenía hambre y me estaba malhumorando el tráfico.
Afortunadamente para mí, había solicitado mis ansiadas vacaciones.
No descansaba desde hace 2 años.
no tengo mas familiares, así que me deprimo mas estando solo o viajando solo, así que prefiero trabajar hasta el cansancio, pero creo que ya me estoy haciendo mayor y mi cuerpo y mente me pedían a gritos un descanso.
Además, este tiempo libre me viene bien para enfocarme en lo de la clínica de fertilidad, con suerte encuentre una candidata pronto y el próximo año haya un bebé en casa.
No pude evitar sentir algo de tristeza, ¿Estaré siendo muy egoísta? Trabajo tanto que ese bebé estará más al cuidado de una nana que de mi.
¿Qué pasará cuando crezca y pregunte por su madre?
Esas preguntas me han hecho dudar tantas veces, pero buscaré una solución.
Después de casi dos horas en el tráfico, llegué a mi casa para descansar al fin por un mes. Desactivo la alarma y al entrar me invade un agradable y cálido aroma de comida recién hecha.
También noto que las cosas están más ordenadas e incluso las superficies lisas brillan.
— ¡William!, volviste al fin.— Dijo Elizabeth abrazándome efusivamente
Quizá fue solo un segundo, pero para mi se detuvo el tiempo. Sentí una sensación de calidez que no había sentido y que era agradable.
Alguien me esperaba en casa, y me recibía con una sonrisa feliz de verme y me había preparado de comer.
— Lo lamento Elizabeth, no creí que me quedaría toda la noche en el hospital. Salió una cirugía de emergencia. Perdona por dejarte sola y encerrada.
Hoy comienzan mis vacaciones, así que tendrás que aguantarme por un mes en casa.
— No hay problema jefe. Me da gusto verlo, su casa es muy grande para una sola persona, me sentí deprimida yo sola aqui, no se como le hace usted.
— Bueno, técnicamente solo llego a dormir.
— Eso noté.
Desayunamos juntos, después fui a tomar una ducha, tengo la costumbre de dejar la puerta del baño abierta, así que escuche cuando ella entró, deje la ducha abierta para que creyera que seguía bañándome, pero quería espiarla para ver porque había entrado.
No pasó nada del otro mundo, entró a recoger mi ropa sucia en un cesto y bajó a lavar.
Me pregunto si esto es como tener una esposa.
Entró una llamada al teléfono de casa.
Yo estaba bajando las escaleras, cuando note que Elizabeth había contestado,
Volteo a verme y me paso el teléfono.
Era asistente de la doctora Caroline White, para cambiar mi cita ese mismo día a las cuatro de la tarde.
Eran las 11, dormiría solo cuatro horas, pero valdría la pena.