THELMA —¡Marco!— Grité al verlo aparecer en la cocina con una máscara puesta. —Eres tan fácil de asustar—. Se rió haciéndome poner los ojos en blanco saliendo de la cocina. —Vamos que ya casi es Navidad alégrate—. Me dijo. —No está bien que me asustes así podría haber despertado a Luna—. Le dije. —Eres tan paranoico—. Suspiró sentándose en el sofá a mi lado. —Pareces demasiado paranoico—. Le ignoré y encendí la tele empezando a comerme las palomitas. —Thelma—. Me llamó. —¿Hm? —¿Estás bien? Asentí con la cabeza. —Estoy bien. —Si es por... no es nada Marco, estoy bien—. Aseguré de nuevo cortándole al ver sonar mi teléfono de Allie llamando. —¿Qué pasa? —Sólo quería saber cómo estabas. Estábamos aburridos por aquí sin ti Thelma—. Ella suspiró. —¿Todos los chicos no te están hacie