Audrey —Reacciona, hombre —parpadeo en varias ocasiones al ver el chasquido por parte de Dru justo frente a mi rostro—, mira lo bonito que está el ambiente en el club —dice al señalarme a un par de chicas que bailan de forma sensual cerca de nosotros, a la vez de que se dedican a sonreír mientras nos miran a ambos—, te volviste aburrido desde que esa chica apareció. Tuerzo una sonrisa y niego con la cabeza mientras trato de concentrarme en la cerveza frente a mí, imaginando en cómo serían las cosas si tan solo ella no tuviese novio, tal vez saldríamos juntos, o simplemente nos quedaríamos en casa acurrucados en el sofá con una cobija cubriendo nuestros cuerpos mientras vemos televisión. Maldita sea, si era una completa tortura tener a esa mujer bajo el mismo techo y no poder tocarla. —