Cuando decidí volver al lugar de mis raíces con la finalidad de buscar a mi hermana Sitka por cielo, mar y tierra, solo pensaba en mi objetivo y en la injusticia del pasado a causa de las tiranías de aquel déspota empresario que nos tenía bajo condiciones deplorables en su asqueroso orfanato. Aunque mi hermana y yo no nos pudiéramos ver todo el tiempo, estábamos seguros de salir juntos de allí algún día, cosa que, a hoy día jamás fue posible. Aún recuerdo la principal razón por la que no podía ver a Sitka ni compartir tiempo de calidad con ella: el orfanato estaba dividido en dos áreas importantes, como lo eran el sector de niños y el de niñas. Por lo cual, desde que tengo memoria la única conexión con mi hermana era a través de unos barrotes que dividían a los dos bandos de infantes,