—Caraj0s. —Einar la nalgueó cuando la vio ponerse en cuatro patas. ¿Cómo es que una mujer tan pequeña es capaz de aguantar tanto? Sus pensamientos le jugaron sucio e inmediatamente sintió ganas de correrse. Nunca pensó encontrar a la mujer que lo excitara a tal nivel, jamás creyó que encontraría a la persona con la que se sintiera perfecto. Su coñ0 lo recibe como si ella estuviera hecha a su medida. —Einar... Aaahhh, Dios... —Engla no fue capaz de soportar más, sus piernas no pudieron sostenerla y se dejó caer, pero Einar no dejó que se acostara, él la alzó y le pegó la espalda a su pecho. Él besó el cuello de su ángel y mordió su hombro derecho, aspiró el olor de su pelo y se deleitó con la sensación de entrar y salir de ella mientras su mano izquierda se aferra a su pecho derecho y la