Yo escuchaba todo lo que don Luis me decía lloraba y me preguntaba ¿Por qué, porque papá no me dijo nada porque me deja sola ahora que lo necesito más que nunca ni siquiera pude consolarlo y decirle que no estaba solo que estaba yo y lo necesitaba tanto? Chau que estaba sentado junto a mí me abraso de una manera para consolarme don Luis se acercó puso su mano en mi espalda y dijo: —Llora niña lo necesitas aún no sabemos todo lo que te espera. Me solté a llorar como una magdalena pues desde que mamá murió no lo había hecho de pronto recordé las palabras de mi mamá que tenía que ser fuerte me limpié las lágrimas sonreí y dije: —Perdón continuemos con esto y como le dije licenciado tienen que regresar hasta el último peso y es por el dinero si no por aprovecharse de las circunstancias quie