Hay muchas maneras de mostrar amor. Un toque. Un susurro. Una mirada de complicidad. Si solo eres un forastero, es posible que no le prestes mucha atención a estos "pequeños" gestos, haciéndolos pasar por insignificante pero dado el contexto adecuado, incluso los forasteros obtendrán una pista. Mirando por la puerta abierta del carruaje, sigo mirando en shock la escena ejemplar que se desarrolla ante mí. No hay besos, ni dramáticas declaraciones de amor. Solo hay un niño y una niña abrazados, llorando en silencio. Desde el punto de vista de un extraño, podrían ser simplemente mejores amigos, desconsolados ante la idea de no volver a verse nunca más. Desde el punto de vista de un forastero, la forma en que ambos están actuando puede ser vista como completamente comprensible... Crecieron