Nick en coma

Capítulo 2

—Me siento culpable, ¿Sabes? Esto no hubiese pasado si no me hubiese declarado, seguiríamos siendo amigos, te visitaría normal y no estarías en esta camilla. —Seca sus lágrimas y yo camino de un lado a otro.

—Y siendo amigos hubieses tenido el camino libre de estar con Zach sin cometer alguna traición. —Estaba molesto por la forma en lo que pensaba, si retrocediera el pasado, ¿Así hubiese querido que pasara? Osea, en nuestra relación, ¿Nunca sintió nada? ¿No la hice feliz? ¿Siempre me vió como un amigo? Igual me hubiese roto el corazón, me dejaría en la friendzone y ella igual se iría con Zach.

—Por favor despierta, o dame una señal de que me estas escuchando. —No reaccionaría, quería que sintiera dolor, tanto o peor como yo lo sentí, y no hay mejor forma que dejándole saber que no tengo esperanzas de vivir, bueno, si es que realmente le duele, ya que no pensó en mí cuando estuvo con Zach, ¿Por qué yo debería pensar en ella?—. ¿Qué quieres que haga? O ¿Qué te diga para que despiertes? ¡Los siento Nick! ¡Soy culpable de todo! lo acepto, pero por favor despierta.

—No me importa como te sientas, no quiero vivir mientras ustedes están felices, no quiero sufrir Maddy. —Me estaba alterando de las ridiculeces que decía, no tiene caso que exista, ¿Para qué? ¿Para que me inviten a su boda? No gracias.

—Nick, por favor, despierta, si lo haces me alejaré de todos, te lo prometo, si eso es lo que quieres, o me quedaré, pero si no despiertas, nunca sabré. —La ignoro, estaba muy dolido, es el peor momento para escucharla.

—No puedes disculparte por amar a otra persona Maddy. —Camine hasta el mueble y me senté solo observar.

—¡Nick! ¡Por favor! ¡Vuelve! ¡Lo siento! ¡Perdoname! Eso fue el peor error de mi vida Nick, ¿De qué me sirve vivir si no estás tú a mi lado? ¿De que me sirve ser feliz, seguir amando si no estarás? Te amo Nick, por favor amor. —Le suplicaba a mi cuerpo en llanto, ¡Maldción! Eso ha dolido, Dios, llévame de una buena vez para no seguir viendo esto, no quería sufrir en vida, tampoco me hagas sufrir en muerte.

—No te vayas a morir si no regreso Maddy, no necesito encontrarte en el cielo también, no estaré listo para tener una conversación mutua, bueno, ahh, tú me entiendes, mierda, estoy hablando solo. —Esto es lo que deseaba, sería muy injusto que no me dejara en paz ni en muerte, tratando de seguirme buscando un perdón que no encontrará. Bueno, no debería creerme todo lo que dice, puede decir esas cosas solo para arrepentirme de mi decisión y volver.

—Señorita, otros familiares quieren saludar al paciente. —Interrumpe una enfermera y estoy agradecido por eso, no quiero seguir viendo a Maddy.

Ella voltea a ver a la enfermera y asiente, vuelve a ver mi cuerpo, besa mi mano y se coloca el anillo, si es hipócrita, me suelta y siento mi mano literalmente libre, se separa de mi cuerpo y se voltea, algo me dice que la siga y cuando la enfermera abre más la puerta para ver quien más quería visitarme, lo ví, Zach, con gusto me iría, no escucharía lo que me dirá, es suficiente con lo que dijo Maddy, que por cierto, estos dos solo cruzaron miradas, ¿Estaban enojados entre ellos? ¿Por qué? ¿Porqué decidi morir? Maddy sale y no desea ni rozar sus cuerpos dejandolo pasar primero, la enfermera cierra la puerta y decido quedarme, ¿Qué habrá pasado? ¿Por qué no se hablan? ¿Se sienten tan mal así? Pues es realmente estúpido, el daño ya estaba hecho, más bien que aprovechen. Por primera vez veía llorar a Zach, nunca lo había visto así, parecía estar destrozado, como si hubiese pasado días así, ¿Desde cuando estoy en coma? Estoy casi seguro que siento como si estuviera en el mismo día del accidente.

—Amigo, mejor amigo, de verdad lo siento, sabía que esto podía destrozarte e intente alejarme te lo juro pero… —Me volteo y está cabizbajo—. De verdad comencé a sentir cosas por ella, cosas fuertes e inexplicables, y lo sé, soy débil por haber perimitido que mis sentimientos crecieran, por dejarme llevar, por dejarme enamorar sin ella hacer nada, porque ella nunca hizo nada, yo me metí en su relación y lo siento, no quería lastimarte, no sabes cuantas veces me aleje y me lamentaba tenerla atascada en mi corazón, por eso actuaba de que la odiaba, para eliminar cada emoción, pero cada vez que intentaba odiarla, la amaba aun más. —Cubre sus ojos y los frota.

—¡Basta! —Me tape los oídos, no quería escuchar, sus llantos y sus palabras podían convencerme de perdonarlo, pero no, seré fuerte.

—Yo no me enamoré de ella porque quise o por hacerte la vida imposible, simplemente mi corazón la eligió a ella, y lo sé, debí pensar más que sentir, pero tú también estabas en mi corazón, realmente jamás quise lastimarte, y ahora Maddy me odia. —Suspira y camino hasta él para mirarlo cara a cara de fantasma—. Quiere odiarme, o ya lo logró, odia lo que hicimos porque lastimo a la persona que más ama y esa persona eres tú, ella te ama Nick, demasiado, eres el amor de su vida. —Yo niego.

—No amigo, acabo de hablar con ella, bueno, la escuche, y ese amor que siente por mi es de hermanos, siempre lo sintió y lo confundió por ser una inexperta en las relaciones. —Veo mi cuerpo, me veía destrozado, ese choque me dejó horrible, bueno, no importa, con tal de que no despierte más nunca, todo estará bien, no me importará mi físico.

—Y así estoy, enamorado de ella pero Maddy te ama a ti, tal vez lo que hicimos fue pasión, aventura, pero no creo que me ame. —¿Cómo querías que ella reaccionara? ¿Qué estén juntos como si nada? Al menos hace creer que se siente culpable y por eso te odia u odia lo que tuvieron, porque gracias a eso me hicieron llegar hasta aquí—. Aunque no lo planee, lamento haberme permitido dejar que mi sentimiento crezca por ella, tú eres más importante definitivamente, por favor despierta, te lo pido. —Parte en llanto y deseo salir, no quiero ver esto, quiero irme en paz y no sé en que momento vendrá ese autobús, seguramente hay muchos muertos.

Dos idiotas enamorados de una chica que no sabe lo que quiere, las personas infieles no saben lo que quieren, el doctor se equivoco, ninguna voz hará que quiera despertar, mientras más escuchar, más deseo tengo de no volver jamás. Salgo de la habitación y encuentro una escena muy escandalosa.

—¡Vete de aquí! Por tú culpa él está así, te metiste con mis dos hermanos —gritaba Zander con odio hacia Maddy mientras lloraba.

—¡Zander! —lo regaña Zara.

—Es la puta verdad, ojala nunca hubieses llegado, solo viniste a destruir nuestras vidas, ya no hay banda, sonrisas, mejores amigos ni familia, ¿Y quieres saber el por qué? Mataste a Nick. —Él también estaba muy herido, no sabía que importaba tanto.

—Lo siento —solo logra decir entre tantos sollozos.

—No vengas con tu cara mal lavada a pedir lo siento, eso no lo devolverá, ¿A qué viniste? ¿A hacer feliz a Nick o a partirle el corazón? —Zara abraza a Maddy y me siento traicionado por Zara.

—Ella no sabía lo que sucedería, simplemente son dos almas que tuvieron su click de amor Zander, no puedes culparlos por sentir algo por el otro —defiende Zabdiel y desconozco a cada uno de mis amigos, lo mejor será dejar este mundo donde todos apoyan a una conocida de meses que un amigo de años.

—¿Y Nick qué? ¿Por eso debe ser herido? Seguramente estás actuando y debes estar feliz con el paso libre para ser feliz con Zach. —Zane, Zabdiel y Zara lo miran mal.

—¿Qué diablos te sucede? —pregunta Zane.

—¿Acaso no lo ven? Defienden a una puta desconocida que su mejor amigo Nick, ella es la intrusa, el estorbo, nos arruinó las vidas. —Me coloco al lado de Zander, me sentía apoyado.

—Lo sé, pero ya ha sido castigada bastante, ¿No lo crees? Nick está super mal, respetala al menos en su nombre, sabes que él la quería demasiado. —Zabdiel trata de hacerlo comprender y Zander se niega.

—Tal vez la quiso, pero si realmente quería perdonarla, se hubiese tomado su tiempo, no se hubiese suicidado, eso no fue un accidente, él quería hacerlo, se sentía muerto en vida que simplemente quiso terminar con esto. —Se cruza de brazos.

—¿Por qué lo dices? —Zara lo ve horrorizada y sorprendida, nunca demostre ser una persona depresiva, siempre era el payaso del grupo, así que por lo tanto era increíble de creer.

—Por que un día antes de choque, cuando él ya sospechaba todo aquella noche que regresó y fue al apartamento de Zach pero encontró a su novia y a su mejor amigos juntos, él fue a mi apartamento, estaba herido y destrozado, él quería morirse, y yo lo estaba consolando, había logrado calmarlo y hasta hacerle creer que estos dos no tenían nada, pero llega el día del ensayo y Zach canta la estúpida canción aclarando todas sus dudas, osea, ¿En que diablos pensaban? ¿Cómo le hubieses contado a él para que nada de esto igual no sucediera? —Mira a Maddy y queda cabizbaja—. ¿No dirás nada? Porque es lógico, de cualquier forma esto iba a ser así. —Veo a Maddy respirar pesadamente, aparta a todos y sale corriendo.

—Gracias Zander. —Maddy era mi cura pero también logró ser mi perdición.

—¡Mierda! ¡Zander! —Zabdiel estaba molesto con él.

—¿Qué? ¿Ahora ella se matara? ¿Por decirle la verdad? Sería un milagro para que no siga arruinando vidas, los asesinos deben morir. —Zara lo ve con desaprobación y corre tras maddy.

Zander estaba dolido como yo, él sabe lo que siento y agradezco que pueda defenderme cuando realmente se están poniendo en mi contra, es un gran amigo al que voy a extrañar, no podría quedarme así aunque solo lo tuviera a él, sentía el mundo sobre mí, ¿Por qué la defendían a ella? ¿Por ser el amor de Zach? Entiendo que él sea su hermano de verdad, pero ¿Y yo? ¿No soy nada para ellos? Maddy arruinó mi amistad con Zach, ni él ni yo tenemos la culpa, o bueno, ¡Maldición! No sé a quién justificar, nadie se salva de todo esto, los dos tienen la culpa, estaban consciente. Zander se sienta y cubre su cara, lamento hacerlo sentir así pero deben pensar en mi felicidad y eso es morirme, en vida sufriré como siempre, más corazones rotos, dejándome sin vida, si romper el corazón es solo una expresión de dolor, pues simplemente moriré de eso.

—¿Dejarás que se vaya? —Volteo, alguien me ha hablado, o eso creo, ¿Puede verme? A lo lejos veo una luz, al fin, llegó mi hora.

—Adiós Zander, te recordaré. —Lo abrace aunque no pueda sentirme—. Se tardaron demasiado. —Me separo de Zander y le presto atención a la persona que sale aquella luz.

—No vine a recogerte, aún no es tu hora. —Quedo algo enfadado.

—¿Y por qué no? Si ya estoy listo. —Me acerco a él y lo logro ver bien, venía volando con sus alas más grandes que él y demasiado blancas—. ¿Eres Dios? —Niega y aterriza, sus alas se guardan y es como si mágicamente no hubiesen existido, pareciendo una persona común como yo.

—Soy un ángel —responde a mi inquietud.

—Ok, ¿Me puedes decir por qué aún no es mi hora? —Deseaba irme y si debía cumplir algún reto, haría lo que sea con tal de no volver al segundo infierno.

—Se supone que debes descansar en paz, ¿Cómo lo lograrás? Si aún odias, sientes rencor, debes perdonar primero. —Yo me reí.

—¿Es una broma? ¿Viste lo que me hicieron no? —Él asinte—, Bueno, entonces entenderás que eso es algo imperdonable. —Él niega.

—Estás mal, para subir con nosotros debes aprender a perdonar así aunque te hayan lastimado, si no perdonas tu corazón nunca estará libre, estará en un calabozo con odio y rencor, y se supone que vendrás a un lugar libre y feliz, debes amar y perdonar así aunque no sea correspondido de la misma manera, lo que importará es que tu corazón es tan puro como para perdonar cualquier cosa, te sentirás bien contigo mismo, nunca hagas lo que hacen los demás, no hagas el mal, haz el bien y verás como serás recompensado, no solo lo hagas por una recompensa, sino porque nace de corazón. —Yo asiento tratando de comprender.

—Entonces, no es que sea mala persona, sino que debo liberar mis deudas como el odio y el rencor, tener mi corazón sano, libre de cualquier mal para poder entrar a tu reino, ¿Cierto? —Él asiente y yo le pongo los ojos en blanco—. No creo que logré hacerlo, mejor veré lo que me propone el diablo. —Señalo con mi pulgar hacia atrás y retrocedo pero me detiene.

—Los dos sabemos que no perteneces ahí, aparte de que él es muy engañoso y tendrás una vida peor que de la que te imaginas, yo sé que lograrás perdonar. —Le quito su mano de mi hombro.

—Gracias por decirme el secreto para entrar a su reino, pero si no tengo lo necesario, ¿Entonces por qué estoy así y a qué viniste? —Estaba confundido.

—Estás aquí porque te ayudaremos a conseguir ese perdón para esas personas que quieres pero lo niegas ahora solo por tu orgullo, rencor y odio. —Asiento.

—¿Viniste a darme una lección? —Él asiente—. Y cuándo logré perdonar, ¿Me llevarás? —Él asiente y suspire, me arriesgaré, con tal de no volver, lo intentaré, intentaré perdonar—. Está bien, ¿Trato? —Le extiendo la mano y me ve confudido, luego se ríe negando con la cabeza y me abraza, me sentí raro pero recibí el abrazo, no me iba a comportar mal con la persona que me llevaría a mi felicidad.

—¿Estás bien?  —Se separa de mí y me sonríe, eso se sintió bien, tal vez porque es un ángel y tiene tanta energía positiva o solo lo hizo porque realmente merecía un abrazo, que ser tan comprensivo.

—Sí, ¿Y ahora que hacemos mientras tengo que aprender a perdonar? —Obviamente era un inexperto y haría cualquier cosa para irme ya.

—Zach aún está en la habitación con tu cuerpo, ¿No deseas escucharlo? Podría ser la última vez que lo vuelvas a escuchar. —Se coloca a mi lado y soba mi espalda, yo con facilidad me niego.

—Estoy seguro de que no me hará falta. —Él me insiste con la mirada, y ¡Mierda! Me hace dar cuenta que no lograré este reto, debo perdonarlos pero, ¿Cómo? Ayuda.

—De acuerdo, apenas estamos iniciando, seguramente con lo que te muestre cambiarás de opinión. —El ángel no dejaba de sonreír, a veces hasta podría darme miedo, ¿Siempre son tan alegres? ¿No existe el enojo? Lo averifuaré después.

—Antes de comenzar con esta clase de perdonar a las personas malas, tengo una duda. —Él comienza a cominar por pasillos del hospital y yo lo sigo.

—De acuerdo, pregunta lo que sea. —Las personas atravesaban nuestros cuerpos sin ningún problema, no sé porque algunas veces cerraba mis ojos pensando que realmente me chocaría con una de ellas.

—Hace unos momentos, yo abrí una puerta y una cortina, pero al darme cuenta que era un fantasma atravesé una puerta, ¿Por qué? —Estaba algo confundido.

—Eso algo a tu decisión, si vas a abrir algo como si tuvieras vida y pudieras tocar, lo harás, sentirás que lo estás haciendo, pero si quieres atravesar la puerta, también lo harás, lo único es que cada movimiento que tu hagas, para las personas que están con vida solo sentirán un escalofríos, ellos nunca podrán ver si abriste una puerta o corriste una cortina, eso solo lo sabrás tú y lo sentirás tú. —Asiento muy pensativo.

—Muy bien, ahora si estoy listo para mi primera lección. —Él se detiene y nos paramos en la habitación de un paciente—. ¿Tenemos que visitar a alguien? —El ángel asiente.

—Para los vivos, está es una habitción normal con un paciente, para nosotros, mientras yo lo pida, será una puerta para llevarnos a otra dimensión. —Lo miro extrañado.

—¿Y qué carajos voy hacer en otra dimensión? —Mis groserías Nick, deja de perder puntos con el ángel—. Perdón. —Me retracto y él solo me perdona con una sonrisa.

—No hay problema, con el tiempo mejoraras, lo sé, cuando estemos ahí, lo entenderás. —Abre la puerta y del otro lado se encuentra un campus universitario—. ¿Vendrás? —Extiende su mano y la tomo.