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1394 Words
Justo ahí, los recuerdos de nuestra niñez me llegaron uno detrás de otro . Kaezel leyéndome libros , acompañándome en las noches de tormenta, consolando mis lágrimas cuando extrañaba a mis padres , entrenando juntos el arte de la espada, mi tiempo como su guardia . Todas esas bonitas memorias se vieron manchadas por sus mentiras y manipulaciones . Hasta ahora no había entendido su insano afán de mantenerme siempre a su lado . Desde que cumplí catorce años solía colarse en mi habitación y exigir más de mi tiempo, se enojaba cuando salía a misiones largas y al regreso no me dejaba ni respirar cerca de otra persona que no fuera él. Todo este tiempo había estado involucrado en investigaciones extrañas y descuidando al pueblo que era su deber proteger. Sacudí la cabeza ligeramente para apartar esos pensamientos y concentrarme al cien en la batalla . El rubio tenía el rostro contraído por el enojo y no hacía más que alternar la mirada entre los syatians y yo . Levanté mi espada para iniciar la pelea pero su risa desquiciada me hizo levantar la ceja con interrogación. -No debiste hacerlo Pyh-habló riendo como loco-Tu eres mía, siempre has sido mía y no dejaré que un sucio demonio me arrebate lo que he estado esperando desde hace años-desde cuándo todo el asunto de la guerra se redujo a mi persona . Ugh , parezco el último vino del mundo y eso no me gusta para nada . Cuando se movió pensé que sería para finalmente a****r pero no . En su lugar sacó una jeringa de sabrán los dioses dónde y con brusquedad la insertó en su cuello vaciando su contenido . Su grito me sorprendió, parecía estar siendo quemado desde adentro . Su piel se agrietó y oscureció, sus huesos se movían haciendo sonidos desagradables , de su boca escurría una baba asquerosa y algo parecido a unos cuernos habían nacido de su frente .Cuando abrió los ojos la poca cordura que le quedaba se había esfumado y solo quedaban unos ojos negros emponzoñados de ira . Se movió a gran velocidad y por reflejo me incliné a la derecha solo recibiendo un arañazo en la mejilla . Lo que ahora parecía un demonio super raro volvió a colocarse frente a mí riendo. Por el rabillo del ojo noté a Rex avanzar . -Ni se te ocurra intervenir-le espeté con frialdad y solo provoqué su sonrisa burlona que ahora mismo no tenía tiempo de admirar porque tenía que esquivar al maniático con el que peleaba-Hiver no dejes que se meta-la generala asintió y de un jalón devolvió a su hermano a su posición inicial-Esta presa es mía-la emoción de una buena pelea ya me estaba ganando y con una sonrisa malvada salté al ataque. Era bueno sin dudas . Mi teoría era que el cuerpo de Kaezel había sido modificado con ADN syaitiano . Y su olor me lo confirmaba ,era un mezcla extraña de dragan shadows syatian y humano . Solo sería una muerte más a mi lista . Guardé la espada en su funda y con una daga en cada mano acorté la distancia que nos separaba . Descargaba una lluvia de cuchilladas a una velocidad sobrenatural, la temperatura fría de mi cuerpo se extendía al filo de mis armas y parecían hielo sólido, lo que generaba mayor daño . En una apertura me lanzó de una patada en el abdomen . Di una voltereta en el aire y caí acuclillada en la nieve . Volví a lanzarme sobre él . Está vez había aprendido la lección y trataba de frenar mis ataques con su espada. La diferencia era notoria , yo era pequeña y veloz y él, ahora con su cuerpo mutado horrorosamente , se volvía lento . Aunque la lentitud la compensaba con fuerza , una feroz estocada por el flanco izquierdo casi se lleva mi brazo , por fortuna lo esquivé a tiempo y solo me quedó un feo corte en vertical desde el hombro hasta la unión del codo . Ahora un poco más enojada por haberme hecho sangrar y el hecho de que estaba tratando de darme pelea me hicieron ver que no podía seguir jugando . Esto debía terminar cuanto antes. Quién sabe que más le habría otorgado esa inyección y no estoy dispuesta a dejarlo vivir para averiguarlo . Bloqueando un peligroso corte dirigido a mi cabeza me agaché y barrí sus piernas , con la misma agilidad realicé una acrobacia hacia atrás para marcar distancia y planear el próximo movimiento. El nuevo monstruo no perdió el tiempo y saltó en mi dirección con su espada en alto . Es hora de usar la magia sonreí cruel . -Clypeus terrae-el hechizo levantó un escudo dándome la oportunidad de rodearlo y atacarlo por la espalda . Pateando su espalda contra el muro de tierra aproveché para doblar su brazo diestro en un ángulo antinatural sobre su espalda , para fijarlo clave un karambi asegurándome de que sobresaliera solo la empuñadura . De un salto hacia atrás me preparé para su siguiente movimiento. Se estaba volviendo torpe en el combate ahora luego de tantos golpes y al no conocer sus capacidades con esa nueva forma , moviéndose a base de instinto y furia era muy sencillo de abatir . Buscando una diversión de un nivel más sádico agarre un puñado de nieve y lo moldee como una bola . La lancé al cielo y murmure *glacies clavi* convirtiéndola en más de una docena de picos de hielo que con un movimiento de manos salieron disparadas hacia el cuerpo que trataba de recomponerse sin suerte . Aulló de dolor al ser perforado múltiples veces y solo podía pensar en todas esas personas que dieron sus vidas por él ,ahora lo estaba pagando con creces . Se retorcía igual que una lombriz y eso solo provocaba que sonriera con maldad . Unos segundos después, ya aburrida de sus gritos , finalmente decidí acabar con su sufrimiento. Caminé con elegancia , levanté su espada porque no planeaba manchar mi acero con su sangre , y de un solo tajo separé la cabeza del cuerpo . Mis sensibles oídos se aliviaron , la adrenalina abandonó mi cuerpo y casi caí de rodillas ahí mismo . Con el cansancio dominando mi sangre avancé con calma hasta el ejército de armaduras negras que habían presenciado todo . A unos metros de ellos paseé mi mirada por todos , empezando por los demonios de bajo rango que parecían haber enmudecido , los soldados que estaban tensos con mi presencia, hasta detenerme en el par de hermanos de cabellos plateados . Con el rostro neutro me arrodillé ante ellos coloqué mi espada frente a mí y sin levantar la mirada hablé ,aprovechando las pocas fuerzas que me quedaban . Había olvidado el gran corte de mi brazo que seguía sangrando y otros múltiples pero más pequeños. -Líder de los syaitians . Te entrego mi espada y mi vida como símbolo de paz para finalizar esta guerra-mi orgullo como caballero se estaba manifestando pero tenía que asegurarme de que el resto de los humanos podrían vivir bien-Lo único que pido es que los sobrevivientes humanos sean dejados de lado en sus planes de conquista y puedan vivir en paz en nuevas tierras-la voz comenzaba a notarse cansada y me estaba costando mantenerme despierta. -Fiel guerrera-Hiver rompió el silencio dejado por mis palabras-Has peleado con valor y defendido el honor por sobre la sangre . Dinos tu nombre y aceptaremos el pedido de quien puso fin a esta guerra-la generala sonrió al final de su pequeño discurso sabiendo que me faltaba poco para el desmayo . -Pyhare-levanté la mirada mostrando mis cansados ojos con su tonalidad grisácea casi blanca-Agradezco su misericordia altezas-realice una reverencia elegante .Selje se reirá cuando se entere que por fin le hice reverencia a su hermana. Con ese pensamiento sentí mi cuerpo desplomarse en la nieve e ir desconectándose del mundo poco a poco . Lo último que logré captar fue una calidez envolverme y depositarme en unos fuertes brazos que me acunaron con dulzura . Por reflejo me acurruqué más contra ese varonil torso que sabía a quién pertenecía. Su olor se había vuelto mi favorito y antes de desvanecerme por completo lo escuché murmurar . -Ya estás conmigo mi guerrera-
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