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La líder de Bellum05 había estado bastante ocupada . Cualquiera que la viera diría que se estaba preparando para una rebelión. Noticia de última hora , estaba preparando una rebelión. Ni siquiera Kaezel pudo prever el hecho de que algunas familias habían dejado de pagar sus cuotas y estaban esperando la mínima oportunidad para tomar sus cosas e irse bien lejos . Este hecho tenía a los altos mandos más que furiosos y el trabajo de la noche se había intensificado impidiendo que esas ratas hicieran daño . Porque sí, las amenazas y los atentados habían iniciado desde que una señora le cerró la puerta en la nariz a un guardia imperial que venía a cobrarle su cuota semanal. Finalmente mi querido primo estaba mostrando su verdadera cara . Su lado controlador y desquiciado estaba tomando control y restringió hasta las salidas de la base . Lo evitaba lo más que podía pues en sus ojos notaba una mirada un tanto oscura que no me gustaba para nada . Al día siguiente de haber recibido la carta de las syatianas ,se enteraron del inminente ataque . Toda la base se agitó. El grito de los viejos barbudos maldiciendo mi nombre y mi existencia entera se escuchó en toda la fortaleza . Siendo sincera me dio gracia pues no tenían pruebas en mi contra pero no dejaban escapar ninguna oportunidad para tratar de encarcelarme. Stella se notaba preocupada por mi vida , pues si decidían matarme antes del combate ellos no tendrían oportunidad , aunque ,para bien o para mal , aún necesitaban que empuñara la espada por ellos . El drama tocó a mi puerta un poco más tarde de tranquilizar a la morena . Bueno , en realidad no tocaron , la derrumbaron unos diez guardias que me apuntaron con sus armas mientras me decían que quedaba bajo arresto . Con solo lo que llevaba puesto , un sencillo camisón blanco , me encadenaron y me sacaron con brusquedad . Siempre supe que a los humanos les encantaba llamar la atención por naturaleza y ahora ,una vez más ,lo estaba comprobando en carne propia . Me arrastraron sin cuidado hasta la plaza y solo un ciego no notaría las miradas de preocupación que la mayoría portaban . Todos aquí sabían que eran mis armas las que cuidaban sus casas durante la noche. Me tiraron al suelo logrando arañar mis rodillas y cuando traté de ponerme de pie patearon mi espalda y me aprisionaron contra el suelo . Podría matarlos . Podría acabar con todos y terminar con esto de una buena vez . Pero aún no era el momento , por ahora solo me tocaba aguantar en silencio y esperar al segundo justo para abrirles el cuello con los dientes si era necesario . De la multitud emergió el príncipe con su porte fino y su capa ondeante ,me miró con frialdad y luego se giró al público. -Súbditos de Wisternia tienen ante ustedes a la traidora que ha estado vendiendo información al enemigo-apreté los labios para evitar la carcajada que amenazaba con salir-Una batalla se avecina . Mañana al anochecer pondremos fin a esta guerra que ha durado cien años-el pueblo se veía inseguro y hasta podría jurar que enojado . Sin embargo la melena rizada de Stella recorriendo el perímetro me tranquilizó , cuando todos vitorearon las palabras del rubio y fingieron estar de su lado él sonrió con arrogancia . Dio una orden silenciosa a los guardias que me custodiaban y se retiró llevándome a rastras detrás de él. Antes de que las puertas de la prisión se cerraran les guiñé un ojo divertida a los niños que se despedían con caritas tristes . Me llevaron hasta la última celda , la más oscura y aislada . Me lanzaron dentro y mantuvieron las cadenas ,incluso ajustándolas más. El ardor en las muñecas me hizo sonreír burlona a los guardias que aguardaban por mis gritos de dolor. Sin importarme nada me senté en el suelo y traté de dormir . De todos modos ellos habían interrumpido mi horario de sueño. No sé cuanto tiempo después me levantaron de la peor manera posible. Me lanzaron una cubeta de agua helada y mi grito de sorpresa los hizo reír a los muy idiotas . Al segundo los que gritaron fueron ellos al notar el cambio repentino en mis ojos, estaba furiosa ahora . Iba a explotarles el cerebro lentamente cuando alguien más se dejó ver en el pasillo . Mi querido primo parecía enojado al ver mi estado , no está de más aclarar que solo llevo un camisón de dormir que ahora está empapado haciendo que la tela se pegue y deje ver de más. El príncipe los corrió de inmediato y adentrándose en la celda me cubrió con su capa . -Lamento esto Pyh-su cara de pena solo me daba ganas de golpearlo-Pero no me dejaste opción-levanté la ceja interrogante . -¿De qué hablas?-en serio no tengo ni idea , a estas alturas he hecho tantas cosas . Miró mi cabeza con asco y entonces lo entendí. Ugh ahora con el cabello mojado sin dudas se notan más. Los pequeños cuernos se iban expandiendo lentamente y ahora parecían los de una cabrita bebé . -¿Estarás a mi lado mañana verdad?-la desesperación en su voz me hizo fruncir el ceño-Te quedarás a mi lado por siempre-agarró mi mandíbula con brusquedad y me hizo mirarlo-No me importa que seas una de ellos buscaré la manera de hacerte normal-ok a este ya se le murieron todas las neuronas . Nada de lo que dice tiene sentido . -Kae suéltame-traté de hablar pero su agarre se intensificó y por reflejo mis ojos cambiaron . Pareció asustarse pero de igual manera se enojó aún más. Con fuerza descargó un fuerte golpe en mi mejilla tirándome directo al suelo . -No vuelvas a hacer eso-susurró-Nadie debe saber de esto-volvió a murmurar y me miró con rostro serio-A la hora de la batalla no te separes de mí . A partir de ahora vuelves a ser mi escolta personal y si intentas algo raro esos niños que tanto quieres lo pagarán-mi mirada cambió a una de odio y eso le hizo gracia-Tranquila Pyh cuando todo termine te haré mi esposa y buscaré la manera de volver a dormir ese lado antinatural tuyo-acarició mi cabeza con cariño trató de besar mi coronilla pero lo esquivé y por ello me gané otro golpe . Observé al rubio salir de la celda con tranquilidad y a la vez volvieron a entrar los guardias de antes. Sus miradas de lujuria me obligaron a envolverme en la capa y darles la espalda . Aún con las cadenas trate de masajear mis mejillas que se estaban inflamando por los golpes . Sanarían en unas horas pero eso no quitaba mi deseo de abrir las entrañas de esa bestia con mi espada. Traté de volver a dormir pero ya era imposible , me rugía el estómago del hambre , había un frío del demonio y sumando que estoy toda mojada . Aún de espaldas traté de concentrar mi mente en mi magia . Sentí el cambio, mi temperatura comenzaba a bajar a niveles no humanos, ya la humedad no me molestaba y sin dudas el ambiente helado tampoco teniendo en cuenta que yo estaba aún más fría . Para saciar el hambre no conocía ningún hechizo así que tocaba aguantar ... o no . Miré sobre mi hombro a los guardias y uno de ellos parecía disfrutar de una manzana y una pieza de pollo . Sonriendo con maldad sacudí la tierra y la fruta rodó hasta mis manos . Todos ellos se pusieron en guardia y un fuerte viento los aprisionó contra los barrotes que me separaban del mundo . Juguetee con las llaves pero no las tomé, en cambio agarré el pollo y lo devoré con tranquilidad mientras ellos lloriqueaban que los soltara . Ya con algo de alimento los liberé y me dispuse a descansar . Nunca se me ocurrió revisar pero esa noche la marca en mi cadera finalmente terminó de formarse . Una luna triple , símbolo de magia y poder . Eso solo significa que el sello finalmente se rompió . Ya era hora de demostrar quién realmente soy .
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