/// RUSIA/// Él aun estaba pensando sobre lo que Serkan le había dicho, estaba tan ido en sus pensamientos que no había escuchado a su guardaespaldas entrar, ya tenia pleno conocimiento de que extranjeros estaban pisando su suelo, pero si ignoraba que estaban en la puerta de su mansión esperando ser invitados para entrar. - Mi señor los Alemanes están aquí. Solo hizo una señal con los dedos para que los dejaran pasar, la única cosa que lo detenia a matarlos era el hecho de que comenzar una guerra generaba desestabilización y odiaba no tener el control sobre todo lo que lo rodeaba. - Mi viejo amigo Ale… - Yo no soy tu amigo. Fue la respuesta que obtuvo del Capo quien miraba por la ventana como caía la nieve. - Bueno nos conocemos hace años y yo… - Lo