Ethan Tenerla en casa no era una sorpresa sabía que venía, Denis me lo había dicho, pero también dijo que venía Tita, no solo era ella, eran dos, una tercera que mediará, una que la mantuviera algo lejos de mí, que nos obligará a soportarnos. No había pasado ni un segundo desde que llegó que ya estábamos peleando, diciendo cosas o molestando al otro, con ella no podía, simplemente me sacaba de mi eje, me ponía a la defensiva y todo se iba por el retrete, mi humor, su humor, la empatía no funcionaba, las cosas no fluían. Aun así, acá me encontraba, con mi cuerpo prácticamente pegado al suyo, sintiendo como su aroma a canela mezclada con vainilla entraba por mi nariz, mi piel rozando la suya, las imágenes de mi sueño revoloteando por mi cabeza, jugando con mi psiquis y poniendo a prueba e